La artista fijó su residencia en la Bogotá para desarrollar su carrera como actriz.

Barbara Najas: “Los estudios y el amor me trajeron a Colombia”

La recordada Nena de 3 familias contó en una entrevista exclusiva para EXPRESIONES cómo es su nueva vida en Bogotá, Colombia.

“Se vienen bombas y muchas sorpresas”, es lo único que responde la ecuatoriana Bárbara Najas cuando le preguntamos cuál es la producción internacional en la que la veremos próximamente.

La actriz de 3 familias elude hablar de su participación en la cuarta temporada de Sin senos sí hay paraíso, pero sabemos de buena fuente que forma parte del elenco, en el que tendrá un personaje antagónico.

Radicada en Bogotá hace tres meses y lejos de los ceviches y los mariscos que ama, la visitamos en un confortable departamento situado al norte de la ciudad. Nos recibió junto a su perra Lupita y lo que sí nos comentó es que graba toda la semana en extenuantes jornadas, uniéndose a otros actores nacionales como Shany Nadán y Roberto Manrique, quienes también trabajan en Colombia.

“Antes de fijar acá mi residencia hice un ‘tanteo’, quise experimentar el ritmo de vida, la gente, su gastronomía y el clima. Imagínate pasar de los 38 grados de Guayaquil a los 9 de Bogotá. No fue fácil”.

¿Pero qué la motivó a dejar el Puerto Principal?

Fueron dos motivos: los estudios y el amor. Había contemplando Argentina, donde estudié actuación y producción, pero Colombia es un país cercano de muchas oportunidades para un actor y me encontré con gente amable que me trata como si fuera uno más de ellos”.

Indica que en ese camino aparecieron ángeles como su mánager, y también su novio, Juan Pablo Rincón, “a quien considero mi ángel guardián, mi luz en momentos de oscuridad. Yo me caí fuerte y al levantarme, él estaba ahí”.

Sus ojos brillan y denotan lo enamorada que está. Es que Juan Pablo fue su principal soporte cuando decidió dejar todo por seguir un sueño en el extranjero sin importar el riesgo que esto conlleva. “El miedo a veces frena y corta tus anhelos. Siempre debe quedar la sensación de que lo intentaste al menos y aquí estoy”.

Menciona que sus proyectos van saliendo de a poco, pero a buen ritmo. “Cuando haces las cosas con amor el resultado al final es bueno y te digo que actuar al lado de gente que veía en televisión hoy es una realidad. No daré nombres (risas)”.

Agradece el hecho de que su personaje de la Nena le haya abierto las puertas dentro y fuera de Ecuador. “Era la aniñada humilde. Me emociona aún recordar cada abrazo y foto que la gente me pedía. Marcos Espín me dio la oportunidad de mostrar mi talento”.

La artista enfatiza que para que Ecuador compita con dramatizados de otros países latinoamericanos hace falta crear más escuelas de actuación y producción.

“El Gobierno y otras entidades deben impulsar al arte en su totalidad, necesitamos esa patadita”. Si bien es cierto vive un nuevo ciclo en su vida tanto en lo personal como en lo profesional, estar lejos de su tierra natal la hace valorar y extrañar intensamente a su madre, su mayor apoyo y columna vertebral.