Los dos principales productos no petroleros, que en el 2015 generaron para el país más de $ 5.000 millones en exportaciones, son el imán que atrae inversiones. Por un lado está Aviaereo, que tras una inversión que supera los $ 80.000, apuesta por la industrialización de pequeñas avionetas de fumigación para el sector bananero, generando mayor eficiencia y con menos costos. Por otro, la japonesa Sumitomo, que adquirió 2.100 hectáreas. Esto se dio a conocer en la inauguración de la VII Cumbre de Banano que se celebra en Guayaquil, ciudad que a la par también acoge el desarrollo del XVIII Congreso Ecuatoriano de Acuacultura & Aquaexpo.

En este último evento, en cambio, se anuncia la llegada de la multinacional Cargill, empresa que con una inversión de $ 50 millones espera levantar en el país un centro de investigación y una planta que busca innovar la oferta de alimentos para el crustáceo. La fábrica será la más grande de la región. Estará operativa en el 2018.

Banano: Aviones más eficientes para fumigar

Este año ha sido de expectativas y de progreso para el sector bananero. La estabilidad de los precios y la esperanza de firmar un acuerdo con la Unión Europea, que garantice ventas, ha hecho que la inversión siga siendo un motor para este sector.

La apuesta viene de empresas como Aviaereo, que este año ha empezado a promocionar en el mercado el uso de sus aviones fumigadores. Daniel Texeira, presidente de la firma ecuatoriana, indica que tras una inversión de $ 80.000 en el país se pudo fabricar la primera muestra de avión, que ahora esperan industrializar. Se trata, dice, de una aeronave mucho más liviana, que puede volar bajo y requiere de menos pista para aterrizar.

El proyecto apunta a cubrir la necesidad que tienen pequeños y medianos productores. “Creemos que el costo de fumigación puede llegar a bajar hasta un 50 %. Hay algunas empresas muy interesadas. La idea es ensamblar unos cien en un plazo de dos años”.

Un escenario para difundir este y otros proyecto es la VII Cumbre Mundial de Banano que se inauguró ayer en el Centro de Convenciones de Guayaquil, un evento donde se destacó la incursión de nuevos grupos de inversionistas que están apostando por este sector, como la compañía Sumitomo de Japón, que hoy trabaja en el cultivo de 2.100 hectáreas de banano en la provincia de Los Ríos.

El clima favorable y los suelos altamente productivos, que permiten que el país genere más de $ 2.800 millones en exportaciones, hacen que el banano continúe siendo la fruta favorita. Este año, cuenta Renato Quijano, superintendente de la división agrícola de Plastigama, el sector fue el único cultivo que logró mantener la demanda de insumos de riego, debido a la inversión que han hecho medianas y grandes empresas. “Si otros sectores como el maíz disminuyeron su demanda un 10 %, el banano logró mantenerse”, señala Quijano. Una de las razones son los buenos precios que la caja registra este año: $ 7,30, frente a los $4, 50 del 2015.

Acuicultura: Cargill llega con 50 millones de dólares

No solo una planta, sino un centro de investigación y desarrollo tendrá la multinacional Cargill en Ecuador.

Eduardo Arosemena y Ángel Gómez, director comercial para Ecuador y gerente general, conversaron con Diario EXPRESO sobre los planes de la empresa.

Este centro de investigación le permitirá a Cargill, con 150 años de experiencia y 150.000 empleados en los 70 países donde opera, aplicar la tecnología en todos los ciclos de producción del camarón, pero adaptado al modelo ecuatoriano.

La compañía privada más grande del mundo que no cotiza en bolsa llegó a Ecuador con su unidad de acuicultura por ser el país de América Latina que más produce camarón. Es tercero en el mundo.

La multinacional servía a través de Perú, pero para “ayudar a prosperar a la industria y poner un grano de arena teníamos que tener una operación”, destaca Gómez.

La planta está siendo construida y será la más grande de este tipo, de Cargill, en el mundo. Estará operativa en 2018. Lo primero que estará listo es el centro de investigaciones, a finales de 2017. Inmediatamente sustituirá las importaciones de Perú. Lo que está haciendo es constituir un negocio similar al que tiene en Centroamérica (incluido México), donde lidera el mercado.

Gómez resalta que “la industria va a seguir creciendo, pero en la misma cantidad de hectárea, lo cual supone que subirán los índices de productividad”.

Las proyecciones de la FAO son alentadoras. Dentro de 20 años, más del 60 % de la proteína que va a consumir el ser humano saldrá del agua.

Según Arosemena, la propuesta del líder mundial habla de todo en uno, una fórmula mejorada. Es decir, “un producto aditivado con probióticos y aceites esenciales”. Esto permite mejorar del 20 al 25 % la sobrevivencia del animal, evitando dosificar aisladamente los probióticos y otros elementos. LZR/GL