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Los autos lujosos se pasean por el Estado

Varios vehículos no recibieron ofertas. No se subastaron; fueron transferidos a otro ente

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Los primeros 45 autos fueron exhibidos al público después de publicado el decreto de austeridad.ANGELO CHAMBA / EXPRESO

La misión se cumplió tarde y a medias. En 2017, cuando Eduardo Mangas era secretario de la Presidencia, el Gobierno ordenó que las entidades públicas entregasen sus vehículos de alta gama para que fuesen subastados y se generasen ingresos adicionales para el país. Tres años después, cerca del 50 % de automotores entregados no se han vendido sino que fueron repartidos a otros órganos estatales. Por su estado no fueron atractivos para compradores.

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El entonces Servicio de Gestión Inmobiliaria del Sector Público (Inmobiliar) debía recibir los autos y decidir su futuro; 64 instituciones admitieron que tenían autos de alta gama (de más de 35.000 dólares), pero solo 28 entregaron los vehículos a Inmobiliar. Hasta junio de este año, suman 91 autos transferidos al servicio de gestión.

¿Qué se hizo con la flota de 91 vehículos? El último reporte de cumplimiento del Decreto Ejecutivo 135 (denominado de Austeridad) muestra que 44 modelos fueron subastados. Entidades como el Banco Central, las agencias de control, ministerios, secretarías y empresas públicas entregaron automotores que fueron vendidos por 820.648 dólares.

Otros cuatro modelos están listos para la venta, pero aún no se cumple con el proceso. La emergencia sanitaria derivada de la propagación del coronavirus y el anuncio del cierre de Inmobiliar, que se convierte en una secretaría técnica, incidieron en la limitación para realizar subastas y eventos públicos.

Los restantes 43 carros son los que más llaman la atención porque, pese a la orden del presidente Lenín Moreno, no generaron ingresos ni ahorro. Solo pasaron de una entidad pública a otra.

El informe de Inmobiliar muestra que, hasta junio, gobernaciones, prefecturas, ministerios, municipios, empresas públicas, el Consejo de Participación Ciudadana y hasta la propia Presidencia de la República recibieron vehículos de alta gama que estaban en manos de otra institución del Estado.

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Los vehículos redistribuidos entre instituciones.

En la lista constan siete automóviles Toyota Prius del año 2017 que en lugar de ser comercializados pasaron de manos públicas a otras manos también públicas.

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Esos vehículos fueron donaciones y, por ley, no pueden venderse o subastarse.

Silvana Ramírez, titular de la Secretaría Técnica Inmobiliar, explicó que hay varios motivos detrás del traspaso de vehículos. Esas unidades, destacó, no recibieron ofertas cuando salieron a subasta y se quedaron en los patios de la secretaría.

En parte, la falta de ofertas responde a que los automotores, pese a ser de alta gama, no están en el mejor estado posible por el uso que se les dio desde su adquisición.

Para evitar que se compren nuevos autos, Inmobiliar trasladó las unidades disponibles a entidades que querían nuevos modelos para su uso. Así, explicó la funcionaria, se ahorró y se evitaron nuevos gastos.

El siguiente paso, que ahora recae en la Contraloría, es comprobar que el parque automotor es bien utilizado y sirve para brindar mejor servicio a la ciudadanía. En exámenes anteriores, el ente de control confirmó que varios vehículos se usaban en beneficio de la burocracia. 

Remodelar

  • Desde septiembre de 2017, el gobierno del presidente Lenín Moreno ha gastado más de seis millones de dólares en la remodelación, reparación y readecuación de las oficinas de varias entidades públicas. El gasto se realizó incluso durante los meses de la emergencia sanitaria.

Ahorro

  • En septiembre de 2017, el presidente de la República ordenó que las entidades públicas entren en una fase de austeridad. Se recortó el gasto en horas extraordinarias para la burocracia, los pagos por consultorías y la compra de pasajes aéreos para vuelos nacionales e internacionales.