ATM busca medidas para evitar agresiones

ATM busca medidas para evitar agresiones

Al menos diez agentes de la Autoridad de Tránsito Municipal (ATM) fueron víctimas de algún tipo de agresión por conductores, desde que la entidad acogió la competencia de Guayaquil, el 1 de agosto del 2015.

Al menos diez agentes de la Autoridad de Tránsito Municipal (ATM) fueron víctimas de algún tipo de agresión por conductores, desde que la entidad acogió la competencia de Guayaquil, el 1 de agosto del 2015.

Las dos más recientes ocurrieron este mes. El 8, la uniformada Lilibeth Gómez casi es arrollada por un chofer para evitar una multa por hacer doble columna en las calles Pedro Pablo Gómez y José Mascote.

El otro hecho ocurrió una semana después en la Perimetral, cuando un vehículo golpeó la pierna izquierda de una agente luego de que el conductor se enojó porque lo obligó a que continúe su recorrido.

Por el primer caso, el infractor fue sentenciado a 45 días de pena privativa de libertad y el pago de 1.000 dólares como reparación a los daños causados. Mientras el segundo infractor permanecerá tres días en el calabozo.

Para el gerente general de la ATM, Andrés Roche, se sentó un precedente jurídico como advertencia a los ciudadanos que irrespeten la ley y a quienes la representan.

El jefe de los agentes de tránsito, coronel Enrique Varas, considera que conductores de este tipo deberían asistir a tratamiento médico psicológico y ser castigados con la suspensión temporal de la licencia de conducir, como lo establece el artículo 60 del Código Integral Penal (COIP).

“Estas personas son ‘una bomba de tiempo’, que en cualquier momento pueden actuar igual o peor”, expresó el oficial.

Varas recordó que en los cuatro meses de capacitación de los agentes, se incluyó Relaciones Públicas y Atención al Cliente como parte de las 13 asignaturas estudiadas.

¿Pero por qué este tipo de agresiones no eran usuales cuando estaba la Comisión de Tránsito del Ecuador (CTE)?

A criterio de Varas, sería porque hay conductores que ven a los agentes como jóvenes uniformados con poca experiencia, al tiempo que tienen una posición errada del respeto a la ley. A ello suma que recién se está conformando la estructura para los rangos.

Varas sostiene que los uniformados son capacitados de manera constante. Cita como ejemplo el curso que culminaron recientemente, relacionado a la redacción de partes policiales y de procedimiento penal.

Los 592 agentes y 70 conductores de la ATM culminaron con el curso de actualización de instrucción formal y acondicionamiento físico. Las clases incluyeron defensa personal.

La preparación estuvo a cargo de nueve miembros del Cuerpo de Infantería de Marina y un instructor de artes marciales.

Las 24 horas de preparación permitirán a los uniformados reaccionar en caso de que se encuentren en una escena de riesgo, como las acontecidas en los últimos días.