Asan intentará marcar un antes y un después desde su administración.

Asan: “Fuimos quienes construimos el sistema de agua que hay”

El alcalde de Milagro conversó con EXPRESO sobre las gestiones que realizará para cubrir las necesidades de sus habitantes.

Teniendo en cuenta las falencias que aún existen en Milagro con los servicios básicos (agua potable y alcantarillado), EXPRESO dialoga con Francisco Asan sobre las gestiones que realizará para cubrir las necesidades de sus habitantes. Habla, además, de los retos que debe cumplir. El más grande, según ha dicho, será marcar la línea del antes y después para no ser responsable de las irregularidades que, asegura, se cometieron en la administración de la hasta hace poco alcaldesa Denisse Robles.

- Agua potable. En casi todo el cantón es escasa y en algunas zonas a las que llega, incluso, sale sucia. ¿Qué hará para mejorar el servicio?

- Hay tantas cosas por hacer. Durante mi administración ejecuté la primera fase del plan maestro de agua. Construí cinco sistemas de agua, dos tanques elevados y dos cisternas de tres millones de litros cada una, y dejé aprobada en $ 10 millones la segunda fase que sí se ejecutó, pero con atrasos. Ahora debo continuar con la tercera, que corresponde al centro de la ciudad, al 50 % del proyecto y el tramo más complicado porque las molestias que causará son grandes.

- ¿Debió la anterior alcaldesa ejecutar esa obra?

- Pudo haberla comenzado porque el presupuesto lo tenía, pero hubo atrasos e hizo muchos cambios. Cambios técnicos en especificaciones antes aprobadas por el Banco del Estado (ente que dio el financiamiento), que ahora hay que revisarlos para ver si son correctos. Además, no se cambiaron redes ni se hizo mantenimiento, que era lo indispensable para que el servicio no decaiga. Ahora toca empezar de nuevo.

- ¿Será complejo?

- Esperamos que no, porque como fuimos quienes construimos el sistema de agua que hay ahora (porque antes se compraba solo por tanquero), sabemos dónde está el problema.

- ¿Y cuál es la situación con el alcantarillado?

- Similar. Mi propuesta siempre fue dejar terminada esta obra que inicié en el 2007 y en la que dejé contratado un estudio para que la continúen, pero que lo obviaron. Ahora mi mayor preocupación está en buscar una solución al financiamiento para ejecutar lo que falta de la obra, que serían alrededor de $ 60 millones; además de los $ 20 millones que se requieren para culminar el plan del agua, que incluye la laguna de tratamiento y la estación de bombeo. El presupuesto anual con el que cuento es de $ 40 millones, pero me están dejando una deuda de $ 30 millones. Y es allí donde crece mi preocupación, porque además de buscar el financiamiento, tengo que marcar una línea del antes y después, para no ser responsable de las irregularidades que se cometieron.

- ¿Teme encontrar sorpresas?

- Creo que ya no son sorpresas, pues hemos revisado los precios referenciales de algunas contrataciones y hemos visto que hay sobreprecios. Por eso, lo primero que haré será recabar información sobre el verdadero estado en el que dejan el Municipio. Hay contratos paralizados, como el de la terminal terrestre y el arreglo de algunas calles que está detenido, aun cuando hubo un convenio de fideicomiso que lo están cobrando. Además, dejaron destruir un parque, que nuevo me costó $ 700.000 y por el que justificaron una nueva contratación de casi $ 900.000. Ha habido irregularidades y destrucción en las obras. Daños que se extienden a otros campos, como la recolección de desechos, el trabajo informal y el tránsito, cuyo control ha sido nulo.

- En Milagro, esta última área, la del tránsito, es bastante conflictiva, sobre todo por la existencia de las motos lineales que ofrecen el servicio de mototaxis, algo que está al margen de la ley, pero que es un sistema que sirve a la ciudad en sectores donde no hay buses a ciertas horas. ¿Cuál es su posición frente a este tema?

- Estoy analizando la posibilidad de que podamos vivir con este servicio, lo que no necesariamente quiera decir que las vayamos a regularizar, pero sí que permitamos que se desplacen en zonas donde realmente las necesitan.

- ¿Ha pensado en pedir la competencia total del tránsito?

- Sí, pero para hacerlo debemos llegar a tener una competencia A, lo que implica cumplir con una serie de requisitos hasta septiembre y octubre. Ahora estoy contratando a expertos que me puedan ayudar a reordenar el tránsito para lograrlo. En Milagro hay varios problemas respecto a este tema.

- Tomará entonces tiempo. Pero de hacerlo, ¿ha pensando en contar con un sistema como la metrovía de Guayaquil?

- Sí, pero para tenerlo necesitaríamos, además de una alianza público-privada, contar con el apoyo de quienes ofrecen el servicio de transporte público, algo un poco complejo por la inversión que se requiere. No obstante, sí he pensado en contar con al menos un circuito, a mediano plazo, que permita dar un servicio en estas condiciones.

- En una entrevista anterior, el alcalde de Durán, Dalton Narváez, dijo que trabajará de la mano de la alcaldesa de Guayaquil en algunas obras. ¿Usted lo hará?

- Sí, hay proyectos. Uno de ellos está ligado al manejo de los desechos. Junto a otros alcaldes del bloque socialcristiano y al actual prefecto, se ha pensado en la necesidad de contar con dos rellenos sanitarios, ubicados en la provincia, lo que resultaría realmente beneficioso porque va a aliviar las áreas de utilización.

Al llegar a este punto, Asan hace hincapié en el estado en el que se encuentra el actual relleno sanitario, “ya colapsado, aunque debió durar al menos otros seis años”. Ahora, de no desarrollarse la propuesta mancomunada, buscará un nuevo sitio que -promete- no estará ubicado dentro de la ciudad, por temas ambientales.

- En Milagro es evidente la contaminación y la falta de planificación urbana, un problema que también lo experimentó el cantón durante su administración. ¿Cómo mejorar?

- Voy a firmar con la Espol de Guayaquil un convenio para que hagan un diagnóstico del estado real de la afectación ambiental. A nosotros nos han clasificado como la segunda ciudad más contaminada del país y quiero verificar si es así, y tomar inmediatas correcciones.

- Respecto a la planificación, ¿será igual?

- En este punto, debemos adaptarnos a nuestra realidad. Lo que sí vamos a hacer, y en esto el Municipio de Guayaquil nos puede ayudar, es el tema de las ordenanzas que han dado resultados para mejorar. Me interesa crear una para regular el trabajo informal, que aquí se ha convertido en un camuflaje para el acceso a las drogas; y paralelamente tener un centro integral, similar al del ECU-911 que existe en La Puntilla, para que desde ahí y a través de cámaras y conexiones directas con los agentes se monitoree todo el cantón

- ¿Serán suficientes los cuatro años para ejecutar las obras?

- Nunca es suficiente, pero planificando lo mejor posible podré ir desarrollando esta ciudad.