Afición. Bruno Carranza (i), junto a otro coleccionista, en la exposición.

Los amantes del vinilo tienen una cita en Plaza Colon

Suenan perfectos. Los amantes de la música conocen bien cuál es la principal característica de los discos de acetato. La afición a estos puede quedar en coleccionar los álbumes, pero a Bruno Carranza eso no le basta. Hoy y mañana, y por novena edición consecutiva, este adicto al vinilo organiza una expoferia sobre el tema.

El lema de esta jornada, que tendrá lugar en la Plaza Colón, es un grito desesperado para reivindicar a los melómanos: “Salvemos la cultura... escuchemos en vinilo”. Bruno dedicará, junto a otros coleccionistas, dos días completos para exhibir más de 10.000 discos de vinilo, que, por supuesto, estarán a la venta. “Además se podrá hacer intercambios y hasta subastas”, dice.

Sobre los géneros que se expondrán, menciona “rock, blues, pop, metal, new wave, hip-hop, electrónica, salsa, jazz y música nacional”. Un plus infaltable será el que llevará el coleccionista Eduardo Salvador con su Beatlekiosko ambulante, una furgoneta van psicodélica cargada de todo tipo de accesorios referentes al cuarteto de Liverpool.

Paralelamente a la feria estará la agrupación cuencana Santamuerte, que lanzará su último disco prensado en vinilo y tocará en vivo sus temas. Amenizarán DJ y radios webs.

Mientras que el toque literario lo pondrá el cronista Francisco Santana, que leerá en la cita extractos de su novela ‘Historia sucia de Guayaquil’. BIMP