La duquesa de York mantiene una excelente relación con el hijo de la reina Isabel.

A sus 60 anos Sarah Ferguson se siente sexy y atrevida

Es un apoyo para su exesposo, el príncipe Andrés y está a punto de casar a su hija, Beatriz.

Sarah Ferguson cumplirá 60 años el próximo martes. La exmujer del príncipe Andrés de Inglaterra dice sentirse “sexy, atrevida y súper descarada”. Readmitida en los círculos de la realeza, es un apoyo para Andrés, en el escándalo del caso Epstein y está a las puertas de casar a su segunda hija, la princesa Beatriz.

“Me gustaría ser una abuela de esas a las que pueden acusar de ser hipocondríacas. No lo digo en broma, quiero tomármelo muy en serio, solo tenemos una vida”, reconoce la ex nuera de la reina Isabel. Su cumpleaños llega en un momento delicado en el que Fergie, como se la conoce cariñosamente, deberá afrontar una gran cantidad de retos.

El primero y más importante de ellos es el frente que tiene abierto el príncipe Andrés por su vinculación con el caso Epstein. El ex magnate y multimillonario, que fue amigo cercano del duque durante varios años, se suicidó en su celda el pasado 10 de agosto después de ser acusado de varios cargos por tráfico sexual, pero dejó tras de sí un legado que amenaza con salpicar a múltiples personalidades.

Divorciados desde 1996 después de 10 años de matrimonio y en medio de un gran escándalo para la casa real británica, algo que nunca le perdonará el duque de Edimburgo, en especial la fotografía de uno de sus amantes chupándole el dedo gordo del pie-, los rumores sobre su posible reconciliación amorosa han sido constantes desde hace una década y eso que ella llegó a utilizar el nombre de su ex para pedir dinero, como se demostró en unas grabaciones.

Desde 2008, cuando Fergie se mudó de nuevo al Royal Lodge de Windsor en calidad de amiga de su ex, con quien mantiene una excelente relación y junto al que, según ella, se ha convertido en “un ejemplo de paternidad” a pesar de que el matrimonio no funcionase. Aun así, la duquesa de York vive la mayor parte del tiempo en Verbier, Suiza, donde tiene un chalet de esquí que comparte con Andrés: “Somos la pareja de divorciados más feliz del mundo. Nos hemos separado en cuanto a nuestro matrimonio, pero no el uno del otro”, aseguraba en el Daily Mail.

Lo que le ha abierto las puertas de la casa real de nuevo y le ha llevado incluso a veranear este año con la monarca en Balmoral es el desinterés que dice tener por lo material. A pesar de haberse llevado una cifra que ronda los más de 4 millones de dólares por el divorcio, Ferguson contó durante una entrevista con Harpers Bazaar el encuentro que tuvo con la reina al respecto: “Ella me preguntó qué era lo que necesitaba, y yo le respondí que su amistad. Creo que eso le sorprendió, todo el mundo pensaba que exigiría un buen acuerdo”.