Las preventas petroleras han sido cuestionadas de palabra y en documentos de la Contraloría General del Estado por haber sido mal administradas, según dijo el ministro de Hidrocarburos, Carlos Pérez. Pero eso no significa que hayan sido desechadas como fuente de ingresos. De hecho, el Banco Central de Ecuador aumentó su nivel de reservas internacionales en enero en 400 millones de dólares por venta anticipada de crudo.

¿A qué precio? ¿Con qué país? ¿Cuántos barriles? La autoridad de Hidrocarburos no atendió ayer a EXPRESO ni oficialmente se contestaron estas preguntas desde su departamento o del de Finanzas. Pero la operación consta en el informe de gestión de liquidez publicado por el Banco Central.

A falta de más detalles, el economista Vicente Albornoz es prudente al sacar conclusiones. “No es muy conveniente para el país, salvo que las condiciones de negociación hayan cambiado”, apunta. Y menciona, por ejemplo, que el precio pactado por barril sea mejor al acordado durante el Gobierno de Correa para este mismo tipo de operaciones, con William Vásconez como subsecretario de Financiamiento en el Ministerio de Finanzas manejando las operaciones con China y Tailandia, tal y como ha ido desvelando EXPRESO.

El ministro Pérez también apuntó en su día a que la preventa petrolera sería una alternativa de financiamiento beneficiosa para Ecuador si se manejaba de otra manera, ya que desde el principio de su gestión, el responsable de Hidrocarburos fue enfático en cuestionar las negociaciones heredadas. Incluso, comentó que sería probable que su cartera sacara en estos meses una preventa pequeña para “entender cuál es el mercado y comparar con lo hecho anteriormente”, pese al escaso margen restante.

Lo heredado son 13 contratos con Petrochina, Unipec y Petrotailandia, concretados desde 2009, que están siendo objeto de revisión por la Contraloría por incluir, entre otros cuestionamientos, sobreprecios en el transporte que perjudicaban económicamente al Estado. De ellos, quedan por entregar aún 500 millones de barriles de ocho contratos hasta 2024, pese a que no se ha recibido sino el 88 % de los casi 15.000 millones firmados por el Gobierno de Correa.

Parte de la estrategia anunciada por la autoridad consiste en renegociar los contratos pendientes para liberar barriles de petróleo comprometidos, pero pagados en exceso, para poder colocarlos en el mercado. Ya sea mediante preventa, “por concurso”, según dijo Pérez en su día, o mediante venta a la mejor oferta.

Los 400 millones de dólares de venta anticipada recibidos en enero constan ya como parte de las Reservas Internacionales del Banco Central, según el informe de la entidad, y contribuyen a elevar el nivel de las mismas en 3.255 millones en ese mes.