Sin reacción

"El hecho deja ver no solo el gran estado de indefensión en que vivimos, sino la postración en que se encuentran la ciudadanía y las autoridades"

El hecho de que una paciente de una clínica privada haya fallecido -aparentemente- por error, víctima de un violento ataque de sicarios, deja ver no solo el gran estado de indefensión en que vivimos, sino la postración en que se encuentran la ciudadanía y las autoridades pues ni siquiera un acontecimiento de este calibre ha generado una reacción que movilice a la sociedad.

Muchas interrogantes quedan en el aire, como la falta de certeza acerca de si las autoridades fueron informadas de que había ingresado a una casa de salud un individuo que había sido blanco de una balacera por intento de asesinato; y si se debieron tomar mayores medidas de seguridad en la clínica. Pero más allá de ello, sorprende que un incidente que causó conmoción no haya llevado a las autoridades a realizar las investigaciones necesarias para esclarecer el tema y sobre todo al anuncio de medidas para contener la escalada de violencia en el país. La ciudadanía tampoco ha salido a las calles a expresar su preocupación ni a exigir una reacción decidida de las fuerzas públicas, como ya está ocurriendo en México. La criminalidad se incrementa a pasos agigantados en Ecuador y va tomándose espacios en los que antes se sentía seguridad. Sería muy penoso que el país reaccione cuando sea demasiado tarde.