Nadie quiere otra camioneta
Más respeto merece la inteligencia colectiva de los ciudadanos. Los asambleístas no pueden cobrar sueldo para insultar así al país
Algunos no pueden leer bien lo que sus asesores les dan por escrito y ahora pretenden dársela de médicos y psiquiatras. En la agenda de algunos legisladores opositores está el dar arranque a una nueva camioneta. Compartir el balde entre correístas, socialcristianos, rebeldes de Pachakutik y disidentes de la Izquierda Democrática, sin importarles lo que un episodio similar provocó al país hace varios años atrás: inestabilidad política.
¿Cuáles son los argumentos? Primero, la traición a la patria. Lo borraron del texto para sacar del bolsillo el de acción por omisión.
Ante una eventual negativa de la Corte Constitucional a dar paso a un juicio político en contra del primer mandatario, esgrimen el de incapacidad de salud mental o física. ¡Un poco más de respeto para la inteligencia colectiva de los ciudadanos!
Los asambleístas no pueden cobrar un sueldo para insultar así al país, acomodando causales solo para satisfacer caprichos propios o de sus máximos líderes.
Si tienen las pruebas, que las presenten. Si no las tienen, por el bien del país, es mejor que dejen de lado sus pretensiones antojadizas y busquen llegar a la Presidencia de la República a través del voto y no por un atajo que significaría retroceder a un episodio oscuro de la historia nacional.Más respeto merece la inteligencia colectiva de los ciudadanos. Los asambleístas no pueden cobrar sueldo para insultar así al país, acomodando causales para satisfacer caprichos propios o de sus máximos líderes.