Con disciplina se puede

"Es indispensable que los maestros y directivos de las escuelas tengan respaldo total de los representantes de los estudiantes para que puedan, con autoridad, exigir una estricta disciplina en las aulas"

El retorno seguro a clases es tarea tanto de las instituciones educativas como de las familias. Escuelas y colegios pueden observar todas las medidas de bioseguridad establecidas por el Ministerio de Educación, con rigurosos protocolos para que los alumnos se desenvuelvan en sus instalaciones; sin embargo, nada servirá si los padres de familia no han conversado antes seriamente con sus hijos, haciéndoles tomar conciencia sobre la importancia de una conducta responsable en este momento crucial. La inobservancia de las nuevas reglas puede darse por la inmadurez de adolescentes y niños, que desbordados por la alegría del reencuentro incumplan las normas de distanciamiento, lavado de manos y uso permanente de mascarillas. Es indispensable que los maestros y directivos de las escuelas tengan respaldo total de los representantes de los estudiantes para que puedan, con autoridad, exigir una estricta disciplina en las aulas. El regreso a clases presenciales reactivará numerosas actividades y sectores económicos que agonizan en la paralización y aliviará la presión psicológica y emocional que atraviesan la niñez y la juventud. El éxito de este reinicio escolar es, junto con la vacunación de la mayoría de la población, un primer paso fundamental para volver a una vida lo más normal posible.