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Desencuentros, morbo y placer por crisis

Avatar del Willington Paredes

Una sociedad ciega, sorda y muda es una comunidad inerte que deja que los perversos destruyan el Ecuador de todos.

El Ecuador no es aún una comunidad imaginada, como llama a la sociedad nacional Benedict Anderson (1983). Estudios históricos, sociólogos, jurídicos-políticos, etc. señalan, hace décadas, que en Ecuador no fue la sociedad la que creó al Estado sino a la inversa. Esto genera una fractura entre una y otra, reproducida en crisis de libertad, democracia y política. Por eso los políticos no tienen como orientación y destino de su acción la libertad. Carecen de vínculo con el Estado, sociedad, libertad, institucionalidad y democracia. Esto crea y recrea continuas crisis del Estado y el morbo tóxico de ellos. Sus propuestas y acciones no buscan la unidad de la sociedad ni fortalecer la democracia o defender la libertad, pues solo así la política se refiere a ellas y no a sus intereses mafiosos. Sus partidos viven extraviados del camino y deseando con morbo enfermizo producir continuameante crisis institucionales. Por eso no les interesa defender, expandir y consolidar la libertad sino acumular riqueza a sus vidas tóxicas de libertinaje e indecencia.

Sus prácticas son de confundir continuamente racionalidad política con las torcidas irracionalidades de la empresa, el mercado, el estatismo y sus dogmas. Por eso buscan patológicamente el morbo y el goce orgásmico por debilitar la democracia y sus instituciones. Así se reproduce el desencuentro de Estado, sociedad y nación, haciendo que su accionar destruya libertad, democracia e instituciones y vuelva al Ecuador una nación inviable.

Esto seguirá si dejamos que la política del terrorismo de los violentos haga lo que quieren: destruir la nación. Peor si la ciudadanía solo mira, comenta y cierra los ojos ante esta barbarie. La democracia, el Estado, las instituciones protectoras de la libertad no son de Iza, Correa y otros violentos. Son valores de todos. Sirven para que la libertad no sea una palabra sino un accionar crítico que reacciona y lucha por su país, su libertad, el Estado. ¡Basta a los morbosos del terror, griterío y leguleyada destructora! Una sociedad ciega, sorda y muda es una comunidad inerte que deja que los perversos destruyan el Ecuador de todos. No dejemos que los enanos mentales dinamiten el país que crearon Espejo, Olmedo, Rocafuerte, Pedro Carbo, García Moreno y Alfaro.

¡Ecuador, reacciona!