Día Mundial del Agua

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'Agua potable que, pese a ser un problema que arrastra desde hace muchos años, aún no la tiene Durán, ciudad y cantón en frente de nuestra Guayaquil'.

El pasado 22 de marzo se conmemoró el decimoséptimo aniversario del Día Internacional del Agua, declarado así en la Conferencia de NN. UU. sobre el Medio Ambiente y Desarrollo de Río de Janeiro, en 1992, siendo 1993 el primer año de celebración, a la que se añadirían el Año Internacional de Cooperación en la Esfera del Agua (2013) y el actual decenio: Agua para el Desarrollo Sostenible (2018-2028), que este año se centra en el binomio agua y cambio climático, por su inextricable relación como se ha destacado en la fuente de estos datos. La campaña muestra cómo el uso que hagamos del agua puede ayudar a reducir inundaciones, sequías, escasez y contaminación, y a combatir el cambio climático.

En nuestro país las inundaciones regulares en Los Ríos, han sido aprovechadas tradicionalmente para la siembra de arroz. En cambio, la atroz sequía sufrida por los pueblos del sur de la provincia de Loja provocaron a mediados del siglo pasado el éxodo de los agricultores al centro norte del país estableciéndose en la zona de Santo Domingo de los Colorados y años después en la provincia oriental de Sucumbíos, donde fundaron la Nueva Loja.

Volviendo a lo anterior, el clima extremo habría causado el 90 % de los mayores desastres de la última década en el mundo. Solo el presidente Trump parece no haberlo entendido cuando retiró el apoyo de su país a los esfuerzos globales por atenuar el calentamiento terrestre. Como tampoco entendió la gravedad de la pandemia del coronavirus Covid-19 y demoró en disponer las medidas de protección que luego tomó cuando las víctimas empezaron a azotar a la hermosa ciudad de Nueva York.

2.200 millones de personas, un tercio de la población mundial, vive sin acceso a agua potable. Es decir agua de beber, agua límpida para hacer nuestras abluciones y gárgaras en esta veda del coronavirus. Agua potable que, pese a ser un problema que arrastra desde hace muchos años, aún no la tiene Durán, ciudad y cantón en frente de nuestra Guayaquil, al otro lado del río Guayas.

El problema hace tiempo que dejó de ser local y debió ser asumido por el Estado. Tanto más que Durán debe tener una población que sobrepasa los 200.000 habitantes. ¿Cuándo veremos eso?