Premium

Martín Pallares | Glas: la Fiscalía juega con fuego

Avatar del Martin Pallares

Si lo de Vimos es la única razón para que se haya citado a Glas en el caso, entonces la Fiscalía habría dado un paso en falso

Si el único motivo para investigar la posible intervención de Jorge Glas en el complot para el asesinato de Fernando Villavicencio es el testimonio del cooperante Lenin Vimos, entones la Fiscalía está en serios problemas. 

Se trata de la versión de un delincuente que, sin otras evidencias que la corroboren, resulta débil y riesgosa como para usarla como única prueba para que se lo investigue en ese caso. Según Vimos, otro delincuente de apellido Chonillo le contó que Glas había dado la orden. Es decir, es la versión de un delincuente contumaz sobre la versión de otro delincuente contumaz, algo demasiado débil como para que se pueda involucrar al corrupto de Glas en el tema.

Si lo de Vimos es la única razón para que se haya citado a Glas en el caso, entonces la Fiscalía habría dado un paso en falso y podría quemar su credibilidad ganada en otros casos emblemáticos. Alguien podría decir que la información sobre la citación a Glas y a otros de sus compinches no es oficial y que fue un documento filtrado para causar daño a la investigación fiscal: de hecho, quien la filtró es la abogada de Glas. Sin embargo, si eso fuera cierto, entonces la Fiscalía habría salido a aclarar. 

No obstante, todo es silencio en esa institución, pese a que hay versiones de personas que están participando en la investigación, como una de las hijas de Villavicencio, según las cuales ese documento es verídico. ¿Hay algo más que sustente la citación de Glas en el caso? 

El acto de la Fiscalía no solo es audaz en el caso de este sentenciado por corrupción, sino también en el de los otros vinculados, como el exministro correísta José Serrano. En realidad no hay nada sólido que haga pensar en la participación de ambos personajes. También es cierto, sin embargo, que no se sabe si la Fiscalía tiene otros argumentos para citar a Glas y Serrano. 

¿El contenido en los teléfonos que Glas tenía en la embajada de México cuando esta fue invadida por la Policía? Es posible pero, por el momento, esa es únicamente una posibilidad que nace de la especulación. Lo único que se sabe es que Glas compartía abogados y tenía conexiones con otros mafiosos que, se ha probado, conversaron sobre un eventual asesinato. Sin embargo, de lo que se conoce, no hay nada en firme. Al menos hasta ahora, claro.