Joaquín Hernández: La derrota de Milei

Las explicaciones de la derrota son varias e incluso contradictorias
El partido La Libertad Avanza (LLA) del presidente Javier Milei perdió las elecciones del 7 de septiembre ante la unión de partidos kirchneristas peronistas Fuerza Patria por 13 puntos. Verdadera paliza si se quiere creer a algunos analistas argentinos, una severa derrota para otros. La mayor parte de encuestadoras, excepto analistas como Jaime Durán Barba, habían pronosticado que la oposición kirchnerista ganaría con máximo cinco puntos, tomando en cuenta que la provincia de Buenos Aires era su clásico bastión. Esta provincia posee el 40 % del voto nacional y en ese sentido, su peso es manifiesto e indicativo.
Las explicaciones de la derrota son varias e incluso contradictorias. Giran alrededor de la preeminencia que debe darse a lo político o a lo económico como causas de triunfo o de derrota. Para Jorge Fernández Díaz, de La Nación, por ejemplo, las claves de la derrota están en lo económico y en la insensibilidad del gobierno para responder a sus consecuencias. “Concentrarse únicamente en las planillas de Excel y en los más extravagantes libros de teoría económica sin atender a las secuelas devastadoras de la economía real (recesión, enfriamiento, desempleo) y sin plantearse una reconversión cuidadosa y planificada de los damnificados” es el divorcio entre la situación real que vive la mayor parte de los argentinos y la narrativa del presidente, centrada en equilibrio fiscal y baja de la inflación por una parte; y por otra, el uso de un lenguaje agresivo y lleno de desprecio contra los críticos. “La falta de cuidado, el no reconocimiento de las angustias concretas que provocaba la motosierra, muestra el encapsulamiento de un grupo que se reía del dolor, como si fuera una evidencia del buen rumbo”.
Para Jaime Durán Barba el problema está en lo político y específicamente en la mala campaña del gobierno de Milei. Para él, esta no fue organizada por gente profesional ni conocedora de todos los detalles que implica. “En estas elecciones hicieron todo tan mal, que solo podían obtener esta grave derrota.” Milei prescindió de figuras conocedoras como Santiago Caputo y el equipo de campaña no cometió error tras error con candidatos que escapaban ridículamente en una moto o insultaban a los pobladores. El gobierno dio a esta elección el valor de plebiscito sobre su gestión. ¿Podrá el recuperarse de esta derrota? El próximo 26 de octubre son las elecciones nacionales de legisladores y senadores, y ahí se pondrá a prueba la gobernabilidad del régimen para los dos años de gestión que le quedan.