Columnas

¿Vuelve?

"Para quien sea oposición, la ausencia de Correa en la papeleta no debería ser motivo de tranquilidad"

Arauz, presidente, Correa al poder. Es el mensaje detrás de haber escogido a un perfecto desconocido como su binomio. Rafael no es binomio de nadie. Es él quien tiene acompañantes. ¿Presentaron la candidatura ante el CNE? ¿Cómo? No solo la presentaron, dan por hecho su participación. Ya tienen apodo: el binomio de esperanza. Línea gráfica. Canción. Mientras el resto de ecuatorianos con la justas preguntábamos, ¿pero no es que no podía? Nos anunciaron que fue duro, que enfrentaron no sé cuántas trabas éticas, pero lo lograron. ¿Lograron qué?, disculpen. Mi primera intuición fue ratificar el ‘show’ político que se veía venir. Correa busca confirmar que Unión por la Esperanza (UNES) es Rafael Correa; esta agrupación desconocida hace dos semanas ahora encabeza titulares. Antes de tener que pelearse con organización política 1, 2, y 3 por ser la noticia. Se llevó el estrellato, ahora quien quiera votar por él (aunque no esté en la papeleta) sabe dónde ir. Y más importante aún, cuando el CNE niegue su candidatura, habrá alimentando su rol de víctima política. De perseguido. La cantaleta de ‘nos temen, por eso no nos dejaron participar’. El mito de la fuerza del correísmo se dispara. Ahora, ¿es arriesgado suponer que el CNE negará su candidatura? Pese al factor Ecuador, que bajo cualquier cálculo permite lo imposible, me mantengo en esta postura. Lo más probable es que antes del 17 de septiembre la resolución del Tribunal ratifique la culpabilidad de Rafael. Sería inexplicable un cambio de comportamiento a estas alturas. Desde 2018, con la consulta popular, estuvo clara la intención del gobierno actual: blindarse ante las repercusiones de su traición. Y si por algún motivo el correísmo tuviera injerencia en la decisión judicial, el CNE aún tendría que modificar su reglamentación para inscribir su candidatura. No estoy diciendo que no lo haría, solo que en este contexto político es improbable. Para quien sea oposición, la ausencia de Correa en la papeleta no debería ser motivo de tranquilidad. Antes de este ‘show’, la última encuesta de Cedatos ubicaba al -y cito- “candidato de Correa” en tercer lugar. Imaginémonos después de tanto ruido.