A estos héroes hoy canto mi canto, pues por ellos la patria avizora, libertad convertida en aurora al librarnos del yugo servil. Frente en alto y el alma expectante, como fiel y sin par debutante, de esta lid por demás desigual. Cruenta lucha con garra y fragor, donde el puño elevado nos muestra el camino a seguir es conciencia y es esencia de gran pundonor. Más la astucia y el campo bravío, los llenó de feroz desafío para hacerlos por fin desatar; las cadenas que anclaban la mente... y ejercer el libre albedrío, que Dios les legó con bondad. Suena el plomo fugaz encendiendo, las pasiones de patria, escondidas y en el horizonte mortal se avecina, la derrota del ibérico audaz. Y de pronto la valla perece, en el suelo la sangre ennoblece, resonando a una voz: ¡Libertad! Desde el cielo la Aurora Gloriosa, nos alumbra y con voz melodiosa, escuchamos un canto viril. Los patriotas derraman su llanto y a la tierra con filial encanto, la besan y abrazan sin fin. A estos héroes de alma y de enjundia, que entregaron su vida por ti! Patria mía, hoy mi alma se inclina y ante la Columna de los Próceres de la Independencia destina, este ramo de frases de abril. ¡Guayaquil Independiente, tu bandera celeste y blanco flamea, con tres estrellas de ralea, símbolo eres del pensil! ¡Guayaquil por la patria! Es el lema que caracteriza a nuestra ciudad, guerrera por excelencia, pujante y hospitalaria, pero ¡dónde están los patriotas, los próceres! Hombres y mujeres, que deben vivir en armonía con los demás, cuidarla, protegerla, honrarla, amarla, como se ama a una madre; que les da la vida, el sustento, el hogar donde vivir. ¿Será que no tienen familia? ¿Qué les pasa a guayaquileños y afuereños que viven en nuestra ciudad? ¿Por qué la están manchando con tanta violencia y sembrando el terror? Que el presidente y la alcaldesa hagan un llamado a los patriotas, hombres y mujeres, para trabajar por su ciudad y por la patria entera.

Myrna Jurado de Cobo