Pasamos la prueba de fuego

En las malas se conoce quién está a tu lado.

Los incendios del 6 al 8 de septiembre en Quito mostraron cómo la naturaleza, fauna, viviendas pueden desaparecer en segundos, pero también confirmaron que la voluntad y predisposición de los socorristas, (bomberos, policías, militares, comunidad) para combatir el flagelo es el factor determinante para aplacarlo. Gracias a los medios de comunicación vimos cómo policías y militares dieron su mejor esfuerzo, sin importar que tal función no sea la de su día a día, ni la que corresponda a su rango; ellos apoyaron hombro a hombro a los afectados. En los instantes de gran desesperación que vivieron, ser recursivos fue obligación. Lanzar agua en baldes como en tiempos de la colonia fue una opción que valió; otros lo hacían con mangueras, pero todos aportaron su contingente. ¡Qué orgullo sentí de ser ecuatoriana! La Biblia en Colonsenses 3:23 dice: “Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres”. Cuando todos dan el paso extra, verdaderamente se avanza. Gracias Policía y Ejército por protegernos. En las malas se conoce quién está a tu lado.

Marysol del Castillo