¿Qué pasa con las autoridades?

Lamentablemente gran cantidad de ciudadanos de otros países están tratando de quedarse con el poco trabajo que tenemos los ecuatorianos al ofrecerse con bajos salarios para poder sobrevivir

En Guayaquil todos nos hacemos una pregunta que nadie contesta: ¿por qué las autoridades de esta ciudad creen o no se han dado cuenta de que la delincuencia tiene como primeras opciones en los robos los teléfonos celulares? Se supone que estos son vendidos a alguien que probablemente los arregla de alguna forma y los pone a la venta, lo cual significa dinero fácil y rápido.

Deben existir en la ciudad ciudadanos que negocian los equipos que reciben todos los días, según hemos visto y escuchado en los medios escritos y hablados. ¿Es muy difícil tratar de investigar la localización de estos compradores en lugar de cada día ver en los medios que estos teléfonos son arrebatados a niños, mujeres y varones?, sin que importe si tiene que recurrir a la fuerza o que las personas se dejen robar para evitar cualquier situación crítica.

Pidamos a las autoridades que procedan de esta forma; probablemente recuperemos una relativa tranquilidad por lo menos en este punto.

Además estamos viendo la falta de cooperación entre alcaldesa y gobierno, lo cual hace más difícil la unificación de tareas contra estos problemas, ya que la Policía nacional y metropolitana y las FF. AA. (que ya no tienen que defendernos territorialmente) deben haber estudiado la estadística, recorriendo las calles de la ciudad y de todo el país. Lamentablemente gran cantidad de ciudadanos de otros países están tratando de quedarse con el poco trabajo que tenemos los ecuatorianos al ofrecerse con bajos salarios para poder sobrevivir.

Ing. Édgar Diminich M.