Muerte cruzada: una metáfora, no una realidad constitucional
n este momento que el presidente disolvió la Asamblea tiene que reformar el Código de la Democracia
Metáfora es una figura retórica por la cual un concepto se puede expresar con palabras diferentes y que guarden mínima relación con la realidad; con palabras da mayor significado a un hecho. Por ello la famosa frase de muerte cruzada no existe en la redacción de la Constitución; tampoco su interpretación constitucional se debe tomar de tal forma. El sistema presidencialista que mantenemos nada tiene que ver con el sistema parlamentarista. Es más, se dice que nuestro sistema de gobierno es hiperpresidencialista. ¿Cómo podríamos pensar que el art. 148 de la CRE está diseñado solo para ser utilizado por el presidente de la República para que se llame a elecciones legislativas y presidenciales? ¿Somos presidencialistas o parlamentaristas? En el sistema parlamentarista el presidente o jefe del Gobierno es elegido por la mayoría legislativa y cuando el Legislativo pierde la mayoría, el jefe de Gobierno debe renunciar y se llama a nuevas elecciones de legisladores, quienes a su vez elegirán al nuevo jefe de Gobierno. En nuestro sistema el jefe de Gobierno es el presidente de la República y es elegido separadamente de los asambleístas. Por lógica elemental, al mandar a su casa a los asambleístas no hay razón para convocar a elecciones presidenciales. El presidencialismo es ineluctablemente problemático pues opera según la regla, todo al ganador. Lo que se ha hecho en esta redacción es un híbrido intencional. Dentro de las atribuciones del art. 148 de la Constitución al presidente de la República se encuentra la disolución de la Asamblea y no toca al presidente. En este momento que el presidente disolvió la Asamblea tiene que reformar el Código de la Democracia para que sea mejor el escogimiento de los diputados.
Franklin Lituma Manzo