Maestros de verdad
Hasta hace algún tiempo las labores del docente culminaban los primeros días de enero y se reiniciaban entrado mayo; y se suspendían en cualquier época del curso lectivo
Con distinta frecuencia las sociedades muestran situaciones críticas que permiten buscar aplicaciones favorables (o no muy favorables), de acuerdo a diversos intereses de los involucrados; y más que nada del grado de inteligencia con que se perciba la situación de dificultad presentada. Miguel de Montaigne sostenía que el hombre es hombre solo por la educación, lo cual pone en duda cuán responsables de la deshumanización que nos corroe en todos los niveles de convivencia somos quienes hicimos del magisterio nuestra forma de subsistencia y bienestar. Hasta hace algún tiempo las labores del docente culminaban los primeros días de enero y se reiniciaban entrado mayo; y se suspendían en cualquier época del curso lectivo cuando dirigentes gremiales conjuntamente con las bases programaban algún paro de actividades en procura de justas mejoras salariales. Se conoce que "ni el 4 % de los maestros se anota para subir de categoría" o un dirigente sostiene: el ascenso debe ser automático" (Expreso, 6 de junio de 2022). Un maestro jubilado tuvo que alejarse de un gremio por haber estado de acuerdo con la evaluación a docentes propuesta por un gobierno anterior. En espera de acerbas críticas, expreso que: el servidor docente debe ganarse el aumento ascendiendo por su continua preparación, títulos o grados en la especialidad y, sobre todo, investigaciones publicadas en medios de la especialidad. El nombramiento debe dejar de ser el mecanismo cómodo que abre las puertas a una jubilación, en ocasiones inmerecida.
Ricardo López González