José Antonio Gómez Iturralde

La labor de José Antonio en el AHG fue la formación de maestros, investigadores históricos, rescate del folclor montuvio, edición de libros y más.

Se silenció el Twitter de la historia. El amanecer del martes 21 de julio dejó de existir el historiador José Antonio Gómez Iturralde, perdiendo la ciudad a uno de sus defensores. Han transcurrido 27 años desde que lo conocí en 1993, en casa de nuestro amigo en común, Guillermo de Rubira Orellana. Allí me enteré de que a la par de dirigir sus empresas había decidido dedicarse a la historia, a la que entregó toda su vida. Nos mostró el inicio de su investigación histórica, que se convirtió en la primera edición de su obra: Gómez, una familia guayaquileña 1800-1993. Su segundo texto, en tres tomos, fue Las calles de mi ciudad (1997). Como miembro del directorio de la HJBG rehabilitó la imprenta, publicando la versión facsimilar del Alfabeto para un niño, de José Joaquín de Olmedo, repartiéndose en colegios y al público gratuitamente. 1995 fue muy fructífero en la investigación de su cuarta obra: Los periódicos guayaquileños, 1821-1997, y 1996 lo dedicamos a investigar en la biblioteca municipal Pedro Carbo y de Autores Nacionales Carlos A. Rolando; en Quito en la Biblioteca Aurelio Espinosa Pólit. Luego contactamos al Dr. Miguel Díaz Cueva, en Cuenca, y a otros coleccionistas nacionales y extranjeros. Más adelante fue necesario otro investigador-asistente: doña Delia María Torres Tello. Luego en 1997 al llegar al Archivo Histórico del Guayas (AHG), caído en largo letargo en el Banco Central, José Antonio al conocer la situación de la entidad guayaquileña fundada en 1971 quiso aportar con su destino. El historiador Guillermo Arosemena A. intervino ante el presidente de la Junta Monetaria, Álvaro Noboa Pontón, y fue nombrado director ‘ad honorem’ del AHG. Conscientes de su magnífica labor desde esa institución, sus amigos firmamos una carta de respaldo para su nombramiento: Guillermo Arosemena A., Dr. Alfredo Baquerizo Lince (+), Xavier Coronel Robles (+), Dr. Teodoro Maldonado Riera, Víctor Pino Yerovi (+), Guillermo de Rubira Orellana, Dr. Francisco Urvina Ortiz (+) y Ezio Garay Arellano. El Dr. Francisco Parra Gil (+) le presentó a Carlos Calderón Chico (+), historiador, periodista, y crítico literario, siendo designado asesor de José Antonio. Carlos trajo al grupo de investigadores a Marcos Arteaga, Telmo Viteri, Willington Paredes, entre otros. La labor de José Antonio en el AHG fue la formación de maestros, investigadores históricos, rescate del folclor montuvio, edición de libros y más.

Lic. Ezio Garay Arellano