El acierto del presidente Lasso al designar gerente general de Petroecuador a un ingeniero petrolero no es solo por ser un profesional afín a las actividades de la empresa más grande del país, sino porque el Colegio de Ingenieros Geólogos, de Minas, Petróleos y Ambientales del Litoral (Crigmpal) conoce la trayectoria del Ing. Ítalo Cedeño, en la cual se distingue su capacidad directiva. Lo vimos en un programa de entrevistas y demostró mucha solvencia en sus planes para Petroecuador. Uno de ellos es el proyecto de eliminar los 355 mecheros de la explotación petrolera del Oriente, que son las torres donde sale y se quema continuamente el gas asociado que acompaña al petróleo en el subsuelo y que por motivos legales y logísticos no ha sido recolectado y procesado de manera técnica para uso doméstico en todos los yacimientos de hidrocarburos. Solo en Shushufindi, Petroecuador mantiene desde 1987 una planta de gas abastecida de los antiguos mecheros de dicho campo. Su producción es de 290 t métricas diarias de GLP (gas de uso doméstico); esta planta abastece a Sucumbíos, Orellana y parcialmente a Pichincha. La conversión del gas de los mecheros a GLP produciría $ 500 millones anuales con una inversión de $ 100 millones. Cuando se quema el gas asociado, se consume oxígeno y se producen grandes cantidades de CO2 responsables del cambio climático. Los mecheros son una carga innecesaria para la atmósfera. Aplaudimos la iniciativa.

Walter Zumba