Depurar a las Fuerzas Armadas y a la Policía Nacional

El pueblo ecuatoriano espera que se aparte a los malos servidores de quienes cuidan la paz y la seguridad

Un gran impacto causó en la ciudadanía del país lo que está pasando en las Fuerzas Armadas y en la Policía Nacional. Respecto al radar: con gran esfuerzo económico y técnico el gobierno lo instaló, para con ello frenar el gran contrabando de la droga, por cuanto en la provincia de Manabí existen decenas de campos aterrizaje de avionetas. Por ello ese radar debe estar controlado en todo momento y cuidarlo como un tesoro, pues permitirá detectar los aterrizajes de las avionetas que traen y llevan droga. El Comando debe poner a ocho militares que tengan su carrera limpia y si es posible realizar una investigación sicológica, para con ello garantizar el buen funcionamiento del radar.

Sobre el Comando de la Policía Judicial de Santo Domingo: el robo de $ 180.000, de donde se creía que estaban seguros, más que un banco y sin embargo, los ladrones muy hábilmente se sustraen esa cantidad. La Policía Nacional debe depurarse, por cuanto existen policías activos que cometen robos, asaltan a familias... Deben ganarse el respeto y consideración de la ciudadanía ecuatoriana. Hay desconfianza: un amigo comerciante expuso que él no llama a la Policía cuando va sacar o depositar dinero; para ello va con seis personas. El pueblo ecuatoriano espera que se aparte a los malos servidores de quienes cuidan la paz y la seguridad.

Gualberto Arias Bonilla