Cartas de lectores | A los padres y madres ausentes

Desde que tu corazón dejó de latir, mi vida jamás volvió a ser la misma

Las Navidades son fechas en las que se destacan valores como la generosidad, caridad o solidaridad. Esta reflexión navideña va inspirada por los padres y madres que se ausentaron de este mundo, en especial a mi madre Pochita, quien nos dejó un vacío indeleble, pero plasmados sus huellas, aroma y amor. A esos padres y madres que no compartirán en la tertulia familiar, entre risas y llantos, esas remembranzas familiares en la cena navideña, con la nostalgia a flor de piel. Dios te llamó a sus brazos. Se apagó tu luz, como se apagan las luces todos los días en nuestros hogares. Desde que tu corazón dejó de latir, mi vida jamás volvió a ser la misma. Se fue la reina y los peones ya no son los mismos en el tablero familiar. Nos dejaste tantos recuerdos y vivencias.

Javier Valarezo Serrano