Cartas de lectores: Extradición y un ‘chico silencio’

La justicia angloamericana nos envía un mensaje muy claro: el Sr. Pólit está obligado a reparar el daño

La culpa declarada por el jurado para el Sr. Pólit extiende su responsabilidad total por las consecuencias que se dan sobre los delitos cometidos. Este ciudadano no tuvo estrategia, peor defensa profesional: debió hablar con el fiscal y el juez para proponer un arreglo. Plantear negociar la pena –‘plea bargaining’- a cambio de aportar pruebas para disolver uno o tres cargos en los que estaba acusado. No lo hizo. Lo saben los criminólogos, su jactancia y arrogancia lo muestran de cuerpo entero como un criminal que se cree sumamente inteligente, que puede burlar a las autoridades con mucha facilidad. Declarándose culpable de dos o tres cargos la pena de cárcel se habría quedado en unos 20 o 30 años, en vez de los 100 que le corresponden. El jurado no habría tenido otro remedio que deliberar y emitir su veredicto sobre lo pendiente. La juez debe dictar sentencia y calificará la conducta del Sr. Pólit como el criminal que es, por haber sometido a engaño a todos, más aún a gente que trabaja todavía en Contraloría. Otro ángulo en este penoso asunto: ¿por qué no dice todo lo que sabe? Sigue como Glas, como un ‘chico silencio’ embadurnado en lealtad ciega. ¿Qué tipo de acuerdo tiene con el gran responsable? La justicia angloamericana nos envía un mensaje muy claro: el Sr. Pólit está obligado a reparar el daño y ninguna injerencia puede oponerse a ello. Por eso la extradición aprobada en la consulta debe iniciarse cuanto antes, para traer al país, exprofeso a la cárcel, al Sr. Correa y confiscarle todo el botín que tiene a buen recaudo.

Francisco Bayancela González