Cartas de lectores | ¿Subsidio o suicidio?
Hoy la propaganda de la mafia política y el mercado negro quieren crear caos con el fantasma de la subida del gas
El país no daba más ‘subvencionando’ al mercado negro del diésel.
Durante décadas pagamos el ‘buen vivir’ de la economía criminal sin invertir tan escasos recursos fiscales en servicios públicos.
El mercantilismo clientelar tras el millonario negociado del diésel acude como siempre a sus ‘fuerzas sociales’. Lanzan al pueblo cual carne de cañón, chantajeando al Gobierno a dejar un subsidio que es un ‘suicidio’.
Se calcula que desde 1974 el privilegio de la subvención al diésel equivale al total de la deuda pública.
Vender combustible industrial por debajo de su costo de producción y mercado era mantener las ‘venas abiertas’ del fisco en un derrame de fondos. Más de $1.100 millones anuales ‘becando’ a la minería ilegal y el contrabando de combustibles.
Hoy la propaganda de la mafia política y el mercado negro quieren crear caos con el fantasma de la subida del gas.
Paúl Tapia Goya