Cartas de lectores | Prueba de que las acusaciones no son persecuciones

Los hechos señalados confirman que las irregularidades cometidas son de responsabilidad personal

Diario EXPRESO, en su edición del 20 de octubre, se refiere a las irregularidades establecidas por la Contraloría General del Estado, todas ellas —lamentablemente y como es sabido— vinculadas al correísmo.

Se examinan diversas actuaciones del actual alcalde de Quito, Pabel Muñoz; de la excandidata presidencial Luisa González; de la exministra de Transporte, María de los Ángeles Duarte; y del exministro de Turismo, Fredy Ehlers, sobre quienes cabe señalar lo siguiente:

Muñoz ha sido sancionado únicamente en el ámbito administrativo, por aprobar —sin estudios previos— la apertura de la ruta a Nueva York y la incorporación del Airbus a la empresa TAME.

En el caso de Luisa González, se ha determinado una glosa por USD 9,6 millones, aunque se responsabiliza de ella al expresidente Rafael Correa, por el desplazamiento de aviones de TAME a “paraísos fiscales”.

A la exministra Duarte le correspondía responder, originalmente, por una glosa de USD 19 millones; sin embargo, un pronunciamiento del Tribunal Contencioso Administrativo de Guayaquil ha dejado dicha glosa sin efecto.

En concreto, la única glosa pendiente de resolución es la establecida contra Ehlers, la cual la Corte Nacional de Justicia habría confirmado por USD 15 millones, debido a su responsabilidad en la falta de “políticas empresariales” en la empresa TAME.

Los hechos señalados confirman que las irregularidades cometidas son de responsabilidad personal. No debemos olvidar que los fondos ajenos son siempre ajenos, y que, tarde o temprano, habrá que responder ante la autoridad competente.

Iván Escobar Cisneros