¿Acallar la voz del pueblo?

No quiero mencionar nombres de entidades o empresas (públicas y privadas) que actúan en esa forma ilegal

La ciudadanía está consciente de que las quejas, reclamos, reconocimientos, elogios, etc., etc., emitidos por mi parte y a los que, gracias a Dios y a los Medios que, generosamente, brindan un espacio a sus lectores para exponer sus puntos de vista y los de la comunidad y que, por ende, representan la voz del pueblo, son expuestas de una manera explícita, correcta y, en la gran mayoría de los casos, justificada.

Al respecto, cabe manifestar, con entera satisfacción y marcada gratitud que gran parte de mis cartas publicadas han tenido la acogida y las respuestas adecuadas y oportunas, no así otras que, una vez publicadas, han sido motivo suficiente para tomar algún tipo de amenazas y represalias, haciendo uso y abuso de la jerarquía y el poder que, ocasionalmente, les asiste. Considero, personalmente, que estas acciones injustas y criticables no deberían darse bajo ningún concepto, pues nadie tiene el derecho de acallar la voz de una compatriota (’vocera del pueblo’) bajo intimidaciones y presiones de ningún tipo.

Por hoy, no quiero mencionar nombres de entidades o empresas (públicas y privadas) que actúan en esa forma ilegal y coercitiva pero, si el caso lo amerita, en una próxima oportunidad no tendré reparos en publicar sus nombres.

Fabiola Carrera A.