¡No más abuso y delincuencia!

Es verdaderamente incomprensible la actitud que estamos demostrando los ecuatorianos ante una verdadera invasión que estamos soportando de ciudadanos venezolanos que han venido a este país a delinquir.

Podemos poner como ejemplo lo que está sucediendo en el balneario de Salinas, justamente en la época vacacional, sobre todo en la costa, y especialmente en la ciudad de Guayaquil.

Estos señores se han adueñado de las playas, en las que muchos vienen, duermen y hacen sus necesidades, insultan a los concurrentes del país y al débil resguardo del balneario.

El 12 de febrero asaltaron un consultorio médico de La Libertad dos hombres y una mujer, y gracias a la valentía de un señor de 60 años que los enfrentó, a pesar de que cargaban una pistola -que dispararon pero no salió el tiro-, no pudieron cometer el robo.

En Salinas duermen y colocan paraguas en los parterres, insultan o tienen asustado al pueblo y a los turistas, sin que nadie haga nada para evitarlo.

Es una verdadera vergüenza que existiendo en Salinas 3 bases militares, Policía naval, de tránsito, y municipal no hagan nada para evitar estos desmanes y enviar a esta gente al lugar del que vinieron.

¿Será necesario que tomemos las cosas por nuestras propias manos y demostremos que también en este país existen hombres que no dejarán pasar por encima a nadie que pretenda abusar de ninguno de sus ciudadanos?

Ing. Édgar Diminich M.