Ocio

Guido Chiriboga
Guido Chiriboga habló de sus recuerdos como 'mascota' de Barcelona.Miguel Canales

Guido Chiriboga: "Más que inteligente he sido diligente"

El candidato a asambleísta nacional nació con dos pies izquierdos, pero es un hombre de derecha y amarillo hasta la muerte.

Ingeniero industrial, político y barcelonista, proveniente de una de las familias con mayor civismo por Guayaquil. Guido Chiriboga High se dio a conocer en la lid electoral hace dos años como postulante para la alcaldía de Samborondón, aunque no ganó obtuvo un honroso segundo puesto. Hoy es candidato a asambleísta nacional por CREO y como tiene mucho que decir lo invitamos a que responda El Cuestionario.

De querer ser alcalde de un cantón ahora lo vemos como candidato a la Asamblea Nacional.

Es un nuevo reto y con gusto lo asumo porque estamos en Ecuador en un momento tremendamente complicado, pero que se puede arreglar gracias a Dios y seremos parte de la solución para llevarlo adelante.

Usted tiene una maestría en finanzas, es además catedrático, estudió en la universidad de Cornell, en Estados Unidos. ¿De quién heredó esa inteligencia?

Más que la inteligencia, la diligencia, porque en la vida hay que saber a dónde se quiere llegar y hacer el trabajo que se requiere para ello. El trabajo diario es el que te lleva a la meta con perseverancia y eso hay que enseñarle a nuestros hijos.

Y hablando de hijos, dos de los suyos están becados en el extranjero.

Para mí es un orgullo. Efectivamente están estudiando en universidades de Estados Unidos, lo que me permite ahora estar en una posición de servir en Ecuador. Si tuviera que pagar estas universidades gringas tendría que dedicarme a trabajar por completo en el sector privado.

Usted proviene de una familia de ilustres guayaquileños, su tío Lucho y su papá, Guido, son referentes del patriotismo por esta ciudad.

Curiosamente nuestros ancestros llegaron de Riobamba, años atrás se nos cayó el moño. Ya son varias las generaciones asentadas en Guayaquil. Mi tío y mi papá organizaron el primer campeonato mundial de natación en 1982.

A propósito de natación, me cuentan que usted no era tan bueno, saltaba desde el carril uno y salía por el ocho.

(Risas) Las diligencias de mis hijos y las mías han sido más académicas que deportivas, pongámoslo así.

¿Y en el fútbol, cuando jugaba en el colegio Javier, era tan malo como dicen?

Sí, me ponían de arquero.

Académico sí, nerd jamás, ¿verdad?

Hemos llevado una vida normal y completa. Cuando mis hijos estudiaban en la escuela y en el colegio, los domingos no los dejábamos abrir un libro. No nos moríamos por el resultado de la nota. Todo tenía su momento.

Como hombre que toma riesgos. ¿Es cierto que cuando estudió en Cornell solicitó tomar clases de paracaidismo?

Fundé el club de paracaidismo en Cornell. Tuve que presentar un escrito en la universidad para demostrarles que era algo que nos enriquecía como alumnos, el hecho medir la capacidad para vencer los miedos y probar cosas nuevas. Tengo 24 saltos.

Guido Chiriboga
Guido empezó oficialmente en la política hace dos años cuando se lanzó como candidato a la alcaldía de Samborondón, quedando en segundo puesto.Miguel Canales

Guayaco de la buena cerveza y el seco de chivo. ¿Así le decían en el Javier verdad?

(Risas) Sí, también. Todos los apodos por ser colorado cayeron por aquí.

Y amarillo de toda la vida. Fue mascota de Barcelona de peladito.

Así es y sigo peladito (se toca la calva). Salté a la cancha con Perico León. Para quienes son muy jóvenes, él fue un mundialista peruano que le metió un gol de chilena al Ñato García que jugaba en Emelec. Terminó el partido y me regaló la camiseta que todavía la tengo.

También dicen que aunque no tiene buena voz canta y, pese a que nació con dos pies izquierdos, baila...

(Risas) El ritmo no es mi punto fuerte, pero como estamos en época de campaña lo llevamos con mucha alegría y toca bailar y cantar acompañado de tambores.

Con dos pies izquierdos, pero siempre se manejó por la derecha.

Toda la vida, desde chico. Hay quienes tienen su época gris que se desvían para la izquierda y vuelven a enderezarse, pero no fue mi caso. Siempre tuve claro que las cosas se las gana trabajando.

“No soy de TikTok. He visto a ciertos políticos hacerlo, algunos son muy interesantes y otros para nada. No soy de disfrazarme ni de bailar ni de portar armas de alto calibre”.