La Espol ya tiene un prototipo de vacuna contra la COVID-19
Aunque en el mundo ya existen fármacos disponibles y en aplicación, este trabajo le dará al país una base para futuras vacunas ante nuevos virus.
Los ecuatorianos ya cuentan con un prototipo de vacuna contra la COVID-19. Así lo anunció este lunes 1 de marzo la Escuela Superior Politécnica del Litoral (Espol), que desde el año pasado también emprendíó la tarea de desarrollar una vacuna contra la enfermedad causada por el SARS-CoV-2.
El Dr. (PhD) Washington Cárdenas, jefe del Laboratorio para Investigaciones Biomédicas de la Espol, recordó que este trabajo empezó en marzo del 2020, cuando se presentó el proyecto de creación del prototipo de vacuna a la Corporación Ecuatoriana para el Desarrollo de la Investigación y la Academia (CEDIA).
Coronavirus: La Espol también va tras una vacuna contra el Covid-19
Leer másEl científico ecuatoriano reconoce que es posible que para la fecha en que este prototipo de vacuna esté listo para su producción, en 2022, si se han tomado las medidas necesarias, en el país buena parte de la población ya haya sido inmunizada con fármacos traídas del extranjero que ya están disponibles.
“Pero hay que pensar mucho más allá. ¿Y qué haremos en la próxima pandemia?, la cuestión es estar preparados y este prototipo nos lo permite”, expresó Cárdenas para explicar la utilidad de la tarea que llevan a cabo.
“La importancia de este trabajo radica en que, con nuestro prototipo, estamos creando una plataforma modular que no solo servirá para la actual pandemia. En el futuro se podría cambiar la secuencia genética de SARS-CoV-2 y poner otra de cualquier virus del que nos interese obtener una vacuna”, puntualiza.
- Analizaron la secuencia genética del virus causante del COVID-19,
- Enviaron a sintetizar un fragmento del virus en el extranjero,
- Crearon una plataforma genética para el fragmento sintetizado del virus,
- Una vez clonado el fragmento viral en la plataforma genética, este se introdujo en cultivo celular para producir la proteína codificada. La proteína se cosechó del medio de cultivo y se está purificando para los ensayos preclínicos.
El proceso fue diseñado por Cárdenas, doctor en Biología Evolutiva y con un postdoctorado en Virología Molecular. Comprende desde la determinación del fragmento del virus que se debía sintetizar, la creación de la matriz para el fragmento sintetizado e, incluso, introdujo instrucciones genéticas a esta matriz para la correcta producción de la proteína viral.
Cárdenas explica que esto ha sido posible gracias a los recursos económicos otorgados por CEDIA, al personal altamente entrenado del Laboratorio y a la tecnología para manipular virus a nivel genético con la que cuenta este centro.
Ahora los investigadores están optimizando el proceso de producción de la proteína viral. Es decir, buscan la manera de conseguir más proteína, insumo necesario para ser inyectado en las pruebas que es necesario realizar con roedores.
Se prevé que estas pruebas se inicien en los próximos meses, con la ayuda de colaboradores del INSPI, y de la ESPE. Cárdenas estima que, trabajando con el presupuesto actual, a mediados del año 2022 la vacuna esté lista para producción.