El área de terreno de aproximadamente una hectárea en donde se pretendía, como publicó Diario EXPRESO, levantar una construcción al pie de la playa entre Capaes y Punta Barandúa, en la provincia de Santa Elena, ayer volvió a quedar libre. Personal de la Comisaría Municipal de Santa Elena retiró los pilotes plantados para delimitar el sitio.

“Nadie va a construir nada. Por eso estamos procediendo al retiro de los pilares que ya se habían colocado”, señaló el comisario Javier Reyes.

Reyes reiteró que los propietarios del predio no tenían ningún permiso para construir, por lo que fue arbitrario empezar a colocar las columnas de cemento. “Reconocieron su error y han enviado a retirar sus bienes. Procederemos a multarlos como fija la ley”, manifestó la autoridad.

A EXPRESO, sin embargo, los dueños del predio no le han respondido. Días atrás, este Diario publicó que el terreno le pertenece a un fideicomiso mercantil denominado Henadad. En esa ocasión se llamó a los números que aparecen en la Superintendencia de Compañías y se les envió una solicitud de información a los correos electrónicos allí registrados, pero hasta el cierre de esta edición las respuestas no llegaron.

El lunes, los técnicos del Ministerio del Ambiente paralizaron la obra, que, según dijo el alcalde de Santa Elena, Otto Vera, fue vendida hace 30 años.

“Lo que sorprende es que el Cabildo vendió ese lote. Las escrituras constan de 1970. Eso era antes la carretera vieja, cuando se construyó la Ruta del Spondylus quedó abandonada, es inaudito que ese tramo se lo haya negociado”, comentó el educador Hugo Rodríguez.

El activista Víctor López también dio su punto de vista sobre el tema. “Sería una pena que al construir una edificación en esta área se dañe el entorno natural que tiene. Aquí se puede divisar el horizonte con una espectacular caída del sol, es este el principal atractivo que se tiene al pasar por esta vía. Ojalá se cumpla la disposición que nadie edifique nada en este sitio”, resaltó.