Guayaquil

$ 19,7 millones gasta Cynthia Viteri para trapear a Guayaquil

Hay 12 contratos de Fundación Siglo XXI, 11 de julio de 2020 y 1 de septiembre.  En 2018, con Nebot, solo $ 8,3 millones se destinaron a ese rubro.

Un trabajador limpia las calles de Guayaquil, en la zona regenerada del centro.
Un trabajador limpia las calles de Guayaquil, en la zona regenerada del centro.JUAN FAUSTOS / Expreso

Los adoquines, las baldosas, la regeneración urbana en general, incluidos los murales que andan por allí, en Guayaquil, para verse como se ven, para ser ese atractivo que el Municipio quiere que sean, deben lavarse de vez en cuando. Y ese trapeo, que le cuesta a la ciudad millones de dólares al año, superó el doble del presupuesto en pandemia.

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El entonces alcalde Jaime Nebot, en 2018, y de acuerdo al Portal de Compras, contrató desde la Fundación Siglo XXI la prestación de trapeado y servicios complementarios de limpieza para las áreas regeneradas existentes por $ 8,3 millones, en 10 acuerdos; pero su sucesora, Cynthia Viteri, en 12 contratos, ha gastado $ 19,7 millones en ese tema.

No es nueva esta tarea de limpiar las calles. Fundación Siglo XXI, encargada de esa labor, aclara a EXPRESO en un comunicado que Guayaquil, desde el inicio de la regeneración urbana, hace 20 años, contrata los servicios de trapeado y limpieza para los sectores intervenidos por fundación. Es decir, limpiar es normal.

Lo que no dice Siglo XXI es que en 2020, el año de la pandemia, cuando Guayaquil reclamaba recursos del Estado por un lado, mientras contrataba murales millonarios por otro, hay pagos mucho más altos que en 2018 en cada zona trapeada. Tan altos, que llegan a alcanzar los $ 4 millones en un área que en época de Nebot se pagó solo $ 780.705.

Pasa eso con el trapeado del cerro Santa Ana y sectores aledaños. En 2018, el contrato contempla el cerro, la Numa Pompilio Llona, el cerro El Carmen, la Cárcel Municipal, las escalinatas del Callejón Santo Domingo, las calles Rocafuerte, Loja, Boyacá Norte, Bancario, Víctor Manuel Rendón, Junín y otras zonas. Por prácticamente la misma área de trabajo, en 2020 se pagó tres veces más.

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Otro ejemplo es el de la limpieza de Parque del Fortín y sus alrededores, por la que se pagó 

$ 593.277 en 2018 y en 2020 subió a $ 867.576. O con la trapeada de Puerto Hondo, Ceibos, Urdesa y otros, que pasó de costar $ 497.719 en 2018 a $ 1,2 millones en 2020.

En ese sentido, mientras ningún contrato de 2018 supera el millón de dólares, el más alto de 2020 es el de $ 5,4 millones, para limpiar las calles Aguirre, desde Malecón hasta la avenida Quito, y que contempla otras zonas del centro como Vélez, Chile, Luque y Clemente Ballén. Un acuerdo que cubre sectores similares a estos en la administración anterior llega apenas a $ 766.121.

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Si en algo coinciden ambas administraciones es en los contratistas. Se repiten empresas prestadoras del servicio como Manlim, cuyo gerente es Rafael León García Febres-Cordero. Aunque les va mejor con Viteri, pues pasaron de ganar, por dos contratos, $ 1,2 millones, a hacerse de $ 9,2 millones también por dos acuerdos.

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A Inmobiliaria Intelca, cuyo gerente es Carlos Manuel Zambrano Bravo, también se le mejoró la presencia en el Municipio con Cynthia Viteri. Si en 2018 ganó $ 1,1 millones por dos contratos. Con la alcaldesa, por dos adjudicaciones, ya suma $ 2,8 millones.

EXPRESO consultó a las empresas los porqués de sus nuevos rubros. Se esperaba respuesta al cierre de esta edición. Siglo XXI, por su lado, justifica los contratos.

Algunas adjudicaciones

  • Asoserlisepsia

  1. 2018: Un millón de dólares.
  2. 2020: Nada.

  • Martillo Cajape Rosa

  1. 2018: $ 418,000.00.
  2. 2020: Nada.

  • Intelca

  1. 2018: $ 1,1 millones.
  2. 2020: $ 2,8 millones.

  • Camba Cabello Rommel

  1. 2018: $ 750,000.00.
  2. 2020: $ 600,000.00.

  • Cleanstar

  1. 2018: $ 489.000.
  2. 2020: $ 2 millones.

  • Manlim

  1. 2018: $ 1,2 millones.
  2. 2020: $ 9,2 millones.

“A medida que avanza la regeneración, aumenta también el área que requiere el servicio de limpieza y trapeado. Los valores de los contratos se determinan de acuerdo a las mejores ofertas. Estas contrataciones han sido revisadas por la Contraloría sin que exista observación alguna respecto”.

El vicealcalde Josué Sánchez, la alcaldesa Cynthia Viteri y otros funcionarios.

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Aquí es necesario resaltar que las zonas expuestas en los contratos no han contado con regeneraciones de gran alcance en este año de pandemia, en que se movió el presupuesto para priorizar temas de salud.

La fundación asegura que los servicios fueron contratados luego de procesos de Subasta Inversa Electrónica, lo que permite a los oferentes participantes pujar sus precios.

El exgerente de la fundación, Wilfrido Matamoros, quien ahora es asesor municipal, explica que el proceso de trapeo, aunque necesario, puede también ahorrar costos. “Nosotros, por ejemplo, nos dimos cuenta de que hay lugares menos transitados que pueden limpiarse menos veces al año. Y así pudimos economizar un poco; pero hay que pagar personal. Y a veces suelen duplicarse los rubros si el área es amplia”, describe. Aunque prefiere no comentar nada de los procesos de hoy, que dice desconocer.

En promedio, cada trabajador asignado a este servicio representa un costo mensual de $ 847,31. “La diferencia comprende los gastos de maquinaria, insumos gastos operativos y administrativos”, argumenta. Trapear, resume la entidad, le da empleo a 915 personas.

Las explicaciones no sorprenden a Carlos Medina, presidente del Observatorio Popular Contra el Abuso de los Recursos Públicos. “El Municipio es el más grande responsable de la tercerización que existe en el país. Tiene presupuesto, paga a empresas que contrata, pero no sabemos qué pasa después con esos fondos. Un obrero de la limpieza gana el básico y esto es. ¿Y el resto de la plata dónde está?”, cuestiona.