Está confiada. Tanto que el próximo martes presentará, oficialmente, su renuncia a la Asamblea Nacional. Hasta ahora, Cynthia Viteri, precandidata a la presidencia de la República, se ausenta de sus tareas legislativas con una licencia sin sueldo.

Ella sigue en su precampaña mientras baraja nombres. La postulante mantiene el suspenso sobre quién será su acompañante en la papeleta electoral, así como las posibles alianzas para el Legislativo. El 11 de noviembre se conocerá a su candidato a vicepresidente. Será en un evento en Quito.

Ramiro Aguilar, asambleísta independiente, y Mauricio Pozo, economista y exministro de Finanzas, fueron mencionados por militantes del PSC-Madera de Guerrero como posibles postulantes.

Pero ella descartó al primero. “Es un gran amigo, una persona muy formada e inteligente. Vamos a seguir conversando para otros temas con él”, dijo.

Así, Aguilar podría repetir en una lista para asambleístas.

Menos optimista fue su respuesta sobre sus exaliados en la denominada Unidad. ¿Qué pasa con el movimiento Concertación? “César Montúfar ha dicho (...) que se adhiere a mi candidatura, que me apoya dentro de este proceso, pero debe ser él quien responda”, dijo (ver nota adjunta).

Sin embargo, a línea seguida, Viteri descartó una probable alianza para asambleístas. Anunció que el PSC irá con candidatos propios en todo el país, excepto en Pichincha.

Aquí los candidatos no “necesariamente” van a pertenecer a un partido o movimiento político”, dijo. Habrá, por ejemplo, representantes de jubilados, militares en servicio pasivo, trabajadores o maestros.

La precandidata descartó un distanciamiento con el alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, tras la rotura con Avanza. Aseguró que sigue a su lado apoyándola, y “es el más entusiasta”. RRG