Viaje de Daniel Noboa: Ecuador juega al equilibrio entre las potencias rivales

Ecuador camina en medio de un complejo tablero geopolítico global: busca mantener relaciones sólidas con potencias enfrentadas como Estados Unidos, China y Rusia, sin sacrificar sus intereses estratégicos.

(No te pierdas: Foro de Davos: ¿qué buscó Daniel Noboa en su participación en China?)

En un contexto marcado por guerras, tensiones comerciales y bloques ideológicos en pugna, el país ha optado por un enfoque de pragmatismo estratégico, en lugar de lealtades políticas o alineamientos automáticos. Esta apuesta por la diversificación y el equilibrio, indican los expertos, redefine la política exterior ecuatoriana en tiempos de polarización mundial.

Esteban Santos, decano de la Facultad de Ciencias Jurídicas, Políticas y de Relaciones Internacionales de la Universidad Hemisferios, sostiene que Ecuador debe diseñar su política exterior desde una lógica desapasionada.

“El tema de seguridad ya nos explotó en la cara. Queremos comercio, queremos cooperación, pero sobre todo seguridad”. En esa línea, recalca que si bien muchos países han ofrecido apoyo en el discurso, los únicos que han mostrado acciones concretas son Israel y Estados Unidos.

Por ello, el fortalecimiento del vínculo con Washington (principal socio comercial y en temas de seguridad) no se percibe como un obstáculo para, al mismo tiempo, expandir relaciones con Pekín. De hecho, el presidente Daniel Noboa escogió a China como su primer destino de la gira presidencial en curso.

En ese país buscó inversiones en sectores estratégicos como energía, infraestructura, tecnología y agroindustria. En paralelo, Noboa mantiene una relación cercana con EE. UU., país con el que ha intensificado la cooperación militar, policial y judicial.

Para Santos, este tipo de doble vía no solo es eficiente, sino necesario. “Hay que separar el respeto al derecho internacional de los conflictos internacionales. Ecuador puede tener una postura firme, por ejemplo, en la ONU, pero también mantener relaciones bilaterales funcionales con quienes realmente ofrecen cooperación efectiva”.

Desde su visión, no se trata de alinearse políticamente con una potencia u otra, sino de abrir puertas al desarrollo desde lo político, lo comercial y lo técnico.

Santiago Pérez Samaniego, director de la carrera de Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales de la UTPL, coincide con esa postura. Describe el momento actual como una “lógica de multilineamiento y diversificación” y afirma que esta estrategia le permite a Ecuador mantener una relación estable con actores como Rusia (que sigue siendo un importante comprador de flores y banano ecuatorianos), sin comprometer los vínculos con Estados Unidos o China.

“El accionar diplomático responde a los intereses nacionales y no a dilemas ideológicos. Esa es la diferencia fundamental respecto a gobiernos anteriores”, analiza.

Este pragmatismo también se refleja en el mapa diplomático que la administración de Noboa está configurando. Ecuador ha inaugurado una nueva embajada en Marruecos, una decisión que, según Santos, responde a la necesidad de tener presencia en regiones geoestratégicamente relevantes como África del Norte y el mundo árabe.

Asimismo, se consolidan relaciones con países del sudeste asiático, como Corea del Sur y Vietnam, con los que se negocian acuerdos comerciales complementarios.

Ambos expertos destacan el rol del servicio exterior para viabilizar esta política. Pérez subraya que las misiones diplomáticas deben estar alineadas con la visión estratégica del gobierno, ya sea que las lleven a cabo funcionarios de carrera o elegidos por designaciones políticas.

“Los embajadores son ese enlace directo entre el Estado y estos países. Su labor es fundamental para fortalecer las relaciones bilaterales y facilitar dinámicas comerciales, culturales o de cooperación”.

Santos, por su parte, reivindica el valor de ciertas designaciones políticas, como la de Pablo Zambrano en Estados Unidos, a quien considera un actor eficaz en la promoción de la agenda ecuatoriana. Ecuador, entonces, ha optado por priorizar sus necesidades internas antes que participar en confrontaciones ajenas, según los expertos.

¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad sin límites? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!