Las palabras de consuelo que recibía Florencio Ortiz en los exteriores de la morgue de Naranjito, no eran suficientes para calmar el dolor que sentía. Dos de sus cinco hijos, el mayor y el menor, murieron a consecuencia de un choque frontal contra una plataforma que estaba estacionada en la calle Industria, centro del cantón.

Lo único que sabe el desconsolado padre, es que sus vástagos salieron en horas de la noche del lunes desde su casa en la parroquia Roberto Astudillo. Florencio desconoce hacia dónde se dirigían y se enteró de la tragedia a través de una llamada telefónica que le hicieron desde el hospital cantonal Abraham Bitar Dáger.

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Consternado por los momentos difíciles que estaba atravesando y pidiendo que lo entiendan en su dolor, Ortiz comentó que cuando llegó a Naranjito confirmó que José Ortiz Bajaña, de 32 años y Daniel Ortiz Bajaña, de 21, presentaban heridas en gran parte de sus cuerpos. Los galenos del hospital local no pudieron hacer nada para salvarles la vida y los derivaron hasta un centro de salud de Guayaquil. Sin embargo, en medio camino, los dos hermanos fallecieron.

Luis Parra, pariente de los occisos, llegó hasta la morgue de Naranjito y mientras mostraba una fotografía del lugar de los hechos, indicó que el accidente se registró pasadas las cuatro de la madrugada de este martes. Los hoy fallecidos se movilizaban en una moto color blanco que fue escondida por el populacho, para que las autoridades de tránsito no la retengan.

“Ellos andaban borrachos y chocaron por intentar esquivar a otro carro que venía en sentido contrario y se dieron de frente contra la plataforma”, expresó el joven.

Sin embargo, el padre de los fallecidos, una vez que realice los procedimientos pertinentes y les dé cristiana sepultura a sus vástagos, continuará con la acusación particular para que la justicia sancione al responsable de dejar estacionada la plataforma en una calle, en la que según él, no se debería permitir el paso de este tipo de vehículos pesados.

“Hasta ahora no se ha hecho presente nadie, ningún responsable. Yo sí quiero que esto se investigue para que la muerte de los mis hijos no quede en la impunidad”, mencionó.

Por su parte, los agentes de la Oficina de Investigación de Accidentes de Tránsito levantaron los indicios encontrados en la escena de la tragedia y trasladaron la plataforma hasta el Centro de Retención Vehicular en Milagro.

José Ortiz deja dos menores de 4 y 2 años en la orfandad, mientras que su hermano a un niño de 2. Ambos trabajaban en construcción.