50 de cada 100 viajeros serán jóvenes entre 18 y 35 años de edad, para el 2050, según la consultora Euromonitor Internacional.

Viajar, el nuevo concepto de exito

El 20 % de los viajes internacionales, a nivel mundial, son realizados por jóvenes. Los jóvenes viajan en grupos de amigos y no solos, según los expertos consultados por EXPRESO.

La última vela que sopló decía que tenía 24 años, un número mayor con siete unidades a la cantidad de países que ha visitado. Pedro Fadul es un amante de los viajes que, siguiendo su pasión, ha logrado conocer 17 estados, entre ellos Estados Unidos, Perú y Tailandia.

Su caso no es el único. Cada vez crece la tendencia de viajar en los jóvenes, entre 18 y 35 años. Para ellos, el concepto de éxito ha mutado. La generación anterior consideraba que la victoria social significaba estabilidad económica, adquisición de bienes materiales y constitución de la familia pero, para la actual, lo más importante son las experiencias. Los jóvenes creen que los viajes constituyen su oportunidad de descubrir y aumentar su bagaje cultural.

Según la consultora Euromonitor Internacional, el 20 % de los viajes internacionales a nivel mundial corresponden al segmento juvenil. Además pronostica que esta cifra ascenderá al 50 % en los siguientes años.

La diversión, la búsqueda de la aventura y el descubrimiento de lugares exóticos son las tres principales razones que invitan a este grupo a viajar, según Dolores de Delgado, dueña de una agencia de viajes en la ciudad de Guayaquil. A estas razones, el sociólogo Galo Cervantes añade una. “Los jóvenes buscan destinos para mejorar su calidad de vida o capacitarse”. Además insiste en que, en ocasiones, de esos viajes surgen ideas nuevas que al regresar a su país la ponen en práctica en formato de emprendimientos. Un ejemplo, según él, es que en Guayaquil se hayan desarrollado espacios para la cerveza artesanal.

Dolores de Delgado, agrega que según su experiencia la tendencia se intensifica a partir de los 20 años y que los destinos exóticos como Dubái son más atrayentes a los mayores de 30. Indica también que los jóvenes prefieren viajar en grupos.

El financiamiento de los conocidos también como ‘trotamundos’ no siempre proviene de los padres. Fadul asegura que ahorra para sus viajes. Además recomienda que las primeras travesías sean a países cercanos. “Cuando ya tengas experiencias en viajes se debe ir más lejos. Allí ya cruzas el charco y vas a países de Europa o Asia”.

Los expertos además brindan una lista de elementos que se deben tener en cuenta, antes de realizar uno de estos viajes.

Documentos

Visas y demás

Cuando el destino ya esté decidido busque asesoría legal sobre los requisitos para ingresar. Algunas naciones además del visado, solicitan certificados de vacunas u otros documentos adicionales, fundamentales para su ingreso.

Clima

Consulte la estación

Desconocer el clima o la estación actual del lugar al que usted viajará es un grave error. Sin ese dato, además de no llevar la ropa apropiada, un día en una playa paradisiaca de Filipinas puede echarse a perder, gracias a la temporada de tifones.

Fuente de dinero

Aproveche sus habilidades

Algunos viajeros ahorran para sus travesías, otros consiguen el dinero ya en el destino. Entre las estrategias que tienen para obtener ingresos está dar clases en su idioma natal o conseguir empleos a medio tiempo.

Transporte

Estudie las distancias

Evalúe los costos y las comodidades en las rutas. En Europa, por ejemplo, los trenes son más económicos que algunos boletos de avión. Consulte también los horarios del transporte público. Hay lugares donde el bus pasa una o dos veces al día.

Priorizar gastos

Determinar qué es lo importante adquirir

Compórtese de acuerdo al objetivo de su viaje, descubrir nuevos lugares o ir de compras. Además diseñe estrategias para ahorrar, tales como hospedarse cerca de los lugares que visitará.

Equipaje

De preferencia ligero

Si visitará varios destinos no será cómodo hacerlo con grandes y pesadas maletas. Lleve solo lo que usted considere indispensable para el trayecto.

El personaje: Michael Jiménez | turista del mundo

El dolor, su estímulo para recorrer el mundo

Un tiro en el pecho le quitó a su hermana y frenó uno de sus más grandes sueños: conocer el mundo junto a ella.

Parecía un día habitual. Salió de su trabajo a la hora de siempre, recorrió las mismas calles para llegar a su casa, sin embargo, la policía en la puerta de su hogar le advirtió que esa noche sería diferente. Al entrar la noticia más inesperada lo recibió. Era su hermana menor, Cinthia, que según la versión oficial se había suicidado.

A Michael, quien para entonces iniciaba una vida profesional exitosa en una entidad bancaria, aceptar la ausencia de su hermana fue muy dolorosa.

La extrañaba demasiado. Llegaba a casa deseando encontrarla en la sala viendo películas o escuchar su voz mientras hablaba por celular.

Juntos vivieron una niñez amarga debido a los malos tratos de su madrastra. Aún recuerda que el día después de su cumpleaños 18 empacó unas maletas para mudarse a un pequeño departamento. Estaba ansioso por irse. Sentía como si huir de ese hogar fuese una gloria alcanzada.

Sin embargo, antes de salir algo lo detuvo. Era el llanto de su hermana de quince años. No podía escapar solo así que se la llevó. Él le prometió estar siempre para ella, cuidarla y protegerla. A esta serie de promesas se unió una un poco inusual: trabajar para reunir dinero y juntos recorrer el mundo.

La primera parte del pacto se cumplió. Él laboraba continuamente para ese objetivo. Pero, a medida que la economía mejoraba, el sueño se postergaba.

Después de la partida de Cinthia, Michael no le daba la oportunidad a la melancolía de embargarlo. Salía de su trabajo y recorría las calles como taxista. Así llegaría a su casa lo suficientemente cansado para no llorar.

Intentaba continuar con su vida, pero sentía que el sueño construido con Cinthia lo llamaba. Una mañana despertó y descubrió que su trabajo, casa y rutina le significaban ataduras.

Vendió todo y se dedicó a viajar por el mundo llevando consigo la foto de su hermana para mostrarle cada destino que juntos debían haber visitado. Sin embargo, no está triste. Ahora sonríe. “Chulla vida, hay que vivirla y ser feliz”, sostiene. VLQ