Triunfo la razon

la Unidad no se ha roto ni ha sido ampliada con aquellos que no deponen su candidatura, como cumpliendo consignas divisionistas. Los cinco representantes de los partidos que integran la coalición han adoptado una resolución que consiste en que hasta fines de agosto se podrán presentar precandidaturas para la Presidencia de la República y en esas fechas se resolvería cuáles mecanismos se adoptarían para la selección de un candidato único a la primera magistratura del Estado, ratificando, además, la plena validez de la precandidatura de Cynthia Viteri.

La inicial postura de alguno de los integrantes hizo suponer que La Unidad estallaría en pedazos y que algunos de los grupos que la integraban irían a reforzar otras candidaturas que se han negado intransigentemente a renunciar a la postulación para formar un solo frente, si acaso esa candidatura fuera de oposición al Gobierno. Mantener en forma terca y caprichosa una postulación, lo que hace es dividir a la oposición y propiciar, aunque aparente otra cosa, la victoria oficialista. Ahora, con la supervivencia de La Unidad y el fortalecimiento que ocurre después de una crisis superada, la anhelada victoria será muy difícil para un Gobierno que ha causado una seria circunstancia de carácter económico, que cada vez parece que se agudiza más.

El fortalecimiento de La Unidad con la selección de un candidato único de verdadera oposición, convertiría en marginales otras candidaturas que, con sus votos podrían, sin embargo, cumplir un triste papel, el de chimbadores, aunque esta no fuera su intención, si su terca permanencia solo resulta consecuencia de la obcecación y el autoengaño.

Los partidos y los grupos que integran La Unidad deberían esforzarse en los próximos días, hasta finales de agosto, en el fortalecimiento de sus filas para postular precandidaturas que si no son las elegidas, sirvan para robustecer la estructura de la coalición y propiciar la convergencia de muchas voluntades a favor de la candidatura opositora, a fin de que en las elecciones generales del año entrante muchos miles de votos entierren en las urnas, para siempre, a un régimen dictatorial y soberbio.

haroc@granasa.com.ec