Presentación. ‘El delito de expresarte’ fue elaborado por doce catedráticos, abogados y expertos del país.

Los tres anos de la Ley de Comunicacion, en un libro

La presentación coincidió con el festejo por el Día del Periodista en Ecuador. Fundamedios y el Colegio de Abogados analizaron los efectos de la aplicación de la Ley de Comunicación. El resultado se plasmó en el libro ‘El delito de expresarte’.

La presentación coincidió con el festejo por el Día del Periodista en Ecuador. Fundamedios y el Colegio de Abogados analizaron los efectos de la aplicación de la Ley de Comunicación. El resultado se plasmó en el libro ‘El delito de expresarte’.

El texto recoge la lectura de doce autores frente a la normativa que entró en vigencia en junio de 2013. Ellos querían determinar hasta qué punto la ley ha contribuido a mejorar el ejercicio del periodismo y la libre expresión en Ecuador o si ha instaurado un clima de autocensura y temor.

Dos de los casos analizados son los de los diarios EXPRESO y EXTRA, editados por Gráficos Nacionales, ante la Superintendencia de Comunicación.

César Ricaurte, director de Fundamedios, destacó durante el evento en la Universidad Andina, la noche del jueves, que los diarios han tenido un equipo de defensa muy importante e interesante que les ha permitido pelear las sanciones de la Supercom y marcar jurisprudencia.

Según él, entre octubre de 2013 y octubre de 2016 Fundamedios analizó 606 procesos, 462 con resolución final ante la Supercom y las seis intendencias zonales. De ellos, 448 han sido iniciados por la misma entidad y solo 158 por particulares.

Ricaurte también dijo que se ha sancionado a medios privados en un 97,79 % y a públicos en un 2,21 % por normas deontológicas, rectificaciones y regulación de contenidos.

María Paula Romo, abogada, política y docente, aseguró que tras el análisis de la aplicación de la norma se determinó que esta “ley no está usada principalmente por los ciudadanos, sino, básicamente, por el Estado”.

EXPRESO y EXTRA solicitaron, vía correo electrónico, una respuesta de la Superintendencia a estas afirmaciones. Hasta el cierre de esta edición no hubo respuesta. ER