SOS Venezuela
“No puede haber lugar para la persecución política por razones ideológicas ni la privación ilegítima de la libertad por pensar distinto. Mi visión sobre la democracia va mucho más allá que acudir a las urnas cada cierto tiempo. La democracia es una forma de vida, un pacto de convivencia entre personas que piensan distinto”, es parte del discurso de Mauricio Macri, flamante presidente de Argentina, en la 49 Cumbre del Mercosur, celebrada en Asunción del Paraguay, donde exigió del régimen de Nicolás Maduro la libertad de los presos políticos en Venezuela, cumpliendo los principios básicos de la democracia y los derechos humanos. Y en una actitud sin precedentes, solicitó la aplicación de la “cláusula democrática”, que establece la posibilidad de suspender a un Estado miembro ante la ruptura del orden democrático.
La canciller de Venezuela, secundada por corifeos admiradores del Socialismo del Siglo XXI, inmediatamente protestó por lo que calificaron como una “actitud injerencista” en asuntos internos, llegando al absurdo de acusar a la oposición de golpista, de ser la causante del desabastecimiento de los productos de primera necesidad y de todo el desastre por el que pasa la economía venezolana, ocasionado por la pésima administración y el festín de los recursos públicos.
Lo que sucede en Venezuela no puede ser ignorado ni callado por los latinoamericanos, y así como la Organización de Estados Americanos ha salido en defensa de la democracia y los derechos humanos, lo deben hacer todos los gobiernos democráticos del mundo y los organismos de integración.
Exijamos total respeto a la voluntad ciudadana expresada en las elecciones del 6 de diciembre pasado, y evitemos que se ejecute la estrategia del presidente Maduro y Diosdado Cabello, presidente saliente de la Asamblea Nacional, quienes luego de reconocer los resultados electorales quieren con artimañas disminuir la mayoría absoluta de los asambleístas de oposición, en perjuicio de la democracia y futuro de un pueblo. Apoyemos una gran cruzada por la democracia, alzando nuestras voces por un SOS a Venezuela.
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