Operación. La policía allanó 37 inmuebles para proceder a capturas.

Simulaban compra de vehiculos para robar y extorsionar

Una operación conjunta desplegada en tres provincias del país, permitió la detención de 42 personas presuntamente implicadas en ocho redes delictivas dedicadas al robo, estafa, secuestro, extorsión, subrogación de funciones, clonación y venta de vehícu

Una operación conjunta desplegada en tres provincias del país, permitió la detención de 42 personas presuntamente implicadas en ocho redes delictivas dedicadas al robo, estafa, secuestro, extorsión, subrogación de funciones, clonación y venta de vehículos adulterados.

La operación -denominada Renacer III- se ejecutó la madrugada de ayer, en las provincias de Guayas, Manabí y Pichincha, tras cuatro meses de investigación que revelaron un nuevo método delictivo.

Las indagaciones desplegadas por la Fiscalía, Dinased y Unase permitieron establecer que “los presuntos integrantes de una de las redes simulaban estar interesados en la compra del automotor promocionado en una página de Internet y durante la negociación robaban el vehículo de forma violenta, utilizando armas de fuego”, detalló el viceministro del Interior, Diego Fuentes.

Dependiendo el tipo de vehículo, los delincuentes solicitaban entre 5.000 hasta 20.000 dólares para devolverle el bien a su dueño, caso contrario destruirían el automotor. Si la persona pagaba dejaban abandonado el carro. Y si no pagaban lo desmantelaban para venderlo en partes.

Según Fuentes, la banda trabajaba en esa modalidad en las provincias de El Oro, Guayas y Santo Domingo de los Tsáchilas. Un total de 37 personas fueron detenidas como presuntas integrantes de la red. Entre ellas, un camarógrafo de un canal incautado. “Esta persona estaba dentro de la banda de extorsionadores de robo de vehículos”, aseguró el viceministro.

Otra de las organizaciones se dedicaba a engañar a aspirantes a policías, “haciéndoles creer que podían pasar las pruebas de polígrafo, médicas, académicas y psicológicas”, indicó Fuentes. A cambio pedían cantidades entre 5.000 y 10.000 dólares.

Entre los cuatro involucrados en la red, consta un policía en servicio activo y un servidor del Ministerio del Interior que tenía las funciones de chofer. PVC / CBS