Los seguros y bancos suman a los rescates

Los seguros y bancos suman a los rescates

Según el Banco Internacional, un extranjero que está entre los seis más grandes del sistema, afirma que “en general, nuestra red de agencias se encuentra atendiendo con normalidad; a excepción de los puntos de atención que se encuentran cerrados por

Los bancos saben que son como otros socorristas. Por ahora deben tener a punto sus oficinas o reabrir en sitios provisionales para que las víctimas del terremoto del sábado pasado puedan contar con su dinero. Es que algunas de sus agencias se desplomaron por el sismo o dejaron de atender por prudencia al constatar que los edificios quedaron a la deriva.

Pero el tiempo apremia para esos clientes que además de enfrentarse al periplo de no encontrarse con tiendas abiertas o abastecidas, se les acaba el efectivo. Incluso cuando la ayuda nacional e internacional, a ciertos sectores, florece cada día.

Por lo pronto, los bancos están “atendiendo la emergencia inmediata”. Cada uno trabaja a su manera. Así lo dice Julio José Prado, presidente de la Asociación de Bancos Privados, quien está en el exterior. La meta próxima es llegar al 90 % de cobertura en el corto plazo.

Banco Pichincha, con el 30 % del mercado, explicó que si bien ya abrió siete de sus oficinas en algunas zonas de Manabí, abriría otras seis luego: “oportunamente informaremos de su reapertura o los sitios alternos escogidos”, dijo el banco. En Esmeraldas y Santo Domingo la atención es normal. En Guayaquil, la de la 9 de Octubre; y en Samborondón, la de Samborondón Plaza, seguían sin abrir.

El domingo pasado, el Superintendente de Bancos, expresó que esa entidad, junto con el Banco Central y los bancos privados “hemos venido trabajando de tal manera de buscar que los servicios financieros no se paralicen en las zonas afectadas”. A ello agregó que también estaban coordinando “para que la red de todos los cajeros automáticos operen y así satisfacer la demanda de efectivo en las provincias afectadas”. Sin embargo, por falta de electricidad cuando en sectores aledaños hay trabajo de rescates, la atención es aún a media llave. Según el Banco Internacional, un extranjero que está entre los seis más grandes del sistema, afirma que “en general, nuestra red de agencias se encuentra atendiendo con normalidad; a excepción de los puntos de atención que se encuentran cerrados por estar en una zona restringida al público y controlada”. Se refieren a la agencia de Portoviejo y Tarqui (Manabí).

Banco del Pacífico también activó sus cajeros en esas zonas.

El Banco Guayaquil aprovecha para recordar una forma de enviar efectivo a esos sectores. perjudicados. Desde cualquier sitio, los clientes pueden remitir efectivo a los beneficiarios que pueden ser clientes o no clientes. Todo a través del celular. Ese producto se llama Efectivo Móvil.

Por su parte, las aseguradoras también quieren sumarse a los rescatistas. “Informamos a los asegurados que las compañías de seguros disponen de los recursos necesarios para el cumplimiento de las obligaciones”, según la Federación de Empresas de Seguro del Ecuador (Fedeseg). “El principal propósito de las compañías aseguradoras afiliadas a Fedeseg es realizar el pago de las indemnizaciones a la brevedad y así contribuir positivamente en la reconstrucción”.

Ayer la Superintendencia de Compañías, Valores y Seguros dijo que las aseguradoras reportarán cada semana un detalle de los siniestros reportados por la catástrofe. Se espera en unas tres semanas contar con la información suficiente.

En este caso, “por tratarse de un hecho de conocimiento general que ha causado grave conmoción a la sociedad, las aseguradoras no pueden alegar falta de aviso de siniestro dentro de los plazos pactados en las respectivas pólizas”, dice la Superintendencia. Posteriormente, los asegurados o beneficiarios deberán presentar el reclamo formal a la aseguradora.