La siembra de mil árboles, entre ficus y palmeras, empezó ayer en el parterre central de la avenida Carlos Espinoza Larrea, arteria que conduce desde La Libertad hasta Salinas, entrada al malecón del sector San Lorenzo.

Pero no solo se arborizará el ingreso principal a Salinas. Las autoridades del balneario tienen dentro de sus proyectos sembrar más palmeras a lo largo de los malecones de San Lorenzo, Chipipe y Punta Carnero. La meta es convertir a Salinas en un pulmón verde.

La actividad la encabezan la Fundación La Iguana y el Municipio de Salinas, cuyo propósito es recuperar la verdosidad de cantones como Salinas, mediante la reforestación y protección de los árboles.

El Cabildo santaelenense provee la mano de obra, abonos, productos fertilizantes y tierra compuesta.

El responsable del proyecto ecológico es el ingeniero agrónomo José María Vivar. Él vigilará que susciten las plantas trasplantadas.

Vivar dijo que se efectuarán controles diarios para establecer la evolución de las especies “y en poco tiempo convertir a la avenida en un atractivo verde”.

El alcalde de Salinas, Daniel Cisneros, exhortó a los transeúntes y residentes a que cuiden las plantas. También que denuncien a las personas que sean sorprendidas destruyendo las especies.

“Recordemos que los árboles previenen la erosión del suelo, son el hogar de muchas especies animales en el mundo y juegan un rol esencial en la producción del oxígeno que respiramos”, dijo Cisneros. JL