Rousseff, convertida en la presidenta virtual de Brasil

Inaccesible, aislada, centralizadora, fueron algunos de los adjetivos usados para definir a Dilma Rousseff durante su presidencia en Brasil. Pero desde que fue suspendida, ejerce una actividad virtual febril y hasta montó una suerte de gabinete para responder dudas por Facebook.

En las redes sociales también descarga su menú de críticas al gobierno interino del presidente Michel Temer. Ayer Rousseff respondió preguntas de la población sobre la “extinción del Ministerio de Cultura”, una de las primeras medidas de la nueva gestión.

Coronada por el hashtag #?DilmaEJucaRespondem?, publicó en la red social una foto suya en la que aparece sentada frente a un computador portátil junto al exministro de Cultura Juca Ferreira.

“¿Es bueno recordar que la creación del Ministerio de Cultura fue una de las primeras medidas después de la conquista de las elecciones directas para la Presidencia?”. “Eso no fue una coincidencia. El fin de la dictadura (1964-1985) fue un período que permitió al país volver a soñar con más libertades”, respondió ante una consulta sobre las consecuencias de la degradación de la cartera al rango de secretaría. “Es como si quisieran volver al pasado autoritario”, se despachó.

En la víspera, acompañada por la ministra de Desarrollo Social de su gestión, Tereza Campello, discutió con usuarios los recortes a los programas sociales que prepara el nuevo régimen.

Mientras dura su juicio político por presuntamente adulterar las cuentas públicas, además de disputarle a Temer la opinión pública en el mundo virtual, Rousseff anticipó que viajará dentro y fuera de Brasil para batallar políticamente contra un gobierno que considera “ilegítimo” y fruto de un “golpe de Estado”. AFP