Demolición. Unos 1.158 inmuebles resultaron destruidos por el terremoto del 16 de abril. Los trabajos de demolición continúan.

La reubicacion preocupa tras un mes del terremoto

Una mudanza que inquieta. Los moradores de varios sectores de Pedernales, declarados en riesgo, temen que la reubicación anunciada por las autoridades afecte radicalmente sus vidas.

Una mudanza que inquieta. Los moradores de varios sectores de Pedernales, declarados en riesgo, temen que la reubicación anunciada por las autoridades afecte radicalmente sus vidas.

El Municipio de esta localidad, una de las más dañadas por el terremoto del 16 de abril, ya cuenta con un primer estudio técnico que determinó cinco puntos críticos, todos ubicados al pie del mar, que deberán ser evacuados.

Se trata de Punta de Mico, Boca de Tachina, Las Palmitas, La Chorrera y el malecón de Pedernales, explicó ayer el alcalde Gabriel Alcívar.

La intención es que las personas que habitan esos poblados abandonen sus casas, algunas completamente destruidas, y se alojen en los albergues o viviendas de acogida, mientras se analiza su reubicación definitiva a sectores más seguros.

Los habitantes de la comuna La Chorrera, ubicada a cinco minutos de Pedernales, quieren certezas. Ayer, una delegación llegó al minuto cívico organizado por el Ministerio del Interior en el malecón. Exigían dialogar con el alcalde Alcívar.

Ellos reclamaban que, luego de un mes del terremoto, el funcionario no había llegado a conocer la situación del poblado. Solo un asesor de la cartera del Interior les dijo que tendrán que salir del lugar.

Katiusca Argote vive en La Chorrera hace 40 años. Ella reconoce que desde el inicio esta ha sido declarada zona de riesgo. Admite que no tiene escrituras de los predios que ocupa.

El problema, dijo, es que toda la comuna vive de dos actividades básicas: la pesca y el turismo. “Si nos mueven de aquí simplemente acabarían con este pueblo de pescadores. Eso es lo que sabemos hacer y el mar nunca ha sido malo, solo nos ha dado cosas buenas”, dijo Argote a EXPRESO.

Los comuneros de La Chorrera decidieron solicitar a Alcívar créditos y materiales que permitan levantar viviendas en la misma zona y no en otra.

Esa posibilidad parece imposible. El propio presidente Rafael Correa anunció que no se permitirá nuevas construcciones en estos lugares calificados como no aptos para levantar edificaciones.

“Esto no es a la carta, estamos en una emergencia nacional”, advirtió Correa en el gabinete ampliado del viernes pasado, luego de asegurar que se pudo evitar muchas muertes si se cumplían las normas para construcciones seguras.

Las declaraciones inquietaron al empresario Mauricio Colasma. El sábado, una edificación ubicada en el malecón, y que era alquilada a turistas, fue derrocada por el Cuerpo de Ingenieros del Ejército.

La idea de Colasma era acceder a un crédito e intentar volver a levantar, en el mismo terreno, una nueva construcción para continuar con la actividad que empezó hace tres años.

“Si se concreta la prohibición de usar este terreno nos quedamos en la calle. Ojalá que se hagan nuevos estudios que determinen que es factible empezar en el mismo sitio”, dijo a este Diario.

Según Alcívar, la reubicación en la mayoría de casos será temporal. “No se va a poder construir en la zona costera, al menos hasta que contemos con un nuevo estudio y se establezcan normas de construcción”, puntualizó a EXPRESO.