Al rescate de las bandas de pueblo
A ritmo de cumbia sobresalen los tonos de las trompetas, el compás de los clarinetes, el saxo y el toque de tambores. Visten chaleco y corbata de lazo. Son los integrantes de la Banda Unión Obrera del Azuay, que entre canción y canción, lleva a recordar los tiempos pasados cuando en las fiestas parroquiales todos bailaban al son de las bandas de pueblo.
Seis de ellos son adolescentes y cinco adultos, y cuando no se dedican a la zapatería, peluquería o la sastrería, hacen música.
“Unos son músicos de oficio y otros profesionales”, asegura Diego Zamora Jr., de la Fundación Cultural Digo Zamora (Diza), quien ha venido trabajando un proyecto de rescate de las tradiciones cuencanas con las bandas de pueblo.
Flavio Benavídez, director de Unión Obrera del Azuay, opina que es vital rescatar una parte de la cultura cuencana que se ha perdido con el paso del tiempo. (F) JMJ
