Obligaciones, deberes y derechos tenemos todos los ecuatorianos de acuerdo a la Constitución que rige en el país.

Difícil tiene que ser para el Gobierno ponerse de acuerdo con el sector indígena, tienen muchos interlocutores, portavoces y manifiestan que los dirigentes no los dirigen.

Estos señores caotizan el país, se expresan muy mal de los empresarios, hablan, de manera generalizada, de la “prensa corrupta”; al presidente le dicen de todo, insultos, ofensas.

Sin embargo, cuando alguien manda a los indígenas a los páramos encienden su odio, hablan de fascistas, racista, que ellos son los que dan de comer a todo el país, etc. Es obligación de los investigadores hacernos conocer el porqué de las infiltraciones de vándalos y extranjeros dentro de las movilizaciones.

Las reclamaciones son para que se siga con el subsidio a los combustibles, lo que en suma no les afecta tanto a esta comunidad; los transportistas que protestaron ya están satisfechos.

Los indígenas, al realizar estas marchas, dejan de trabajar y producir en el campo, por lo que dejan de percibir sus salarios y, ¿al trabajador que falte por tres días consecutivos lo pueden despedir o acaso todos son dueños de tierras o los hacendados les pagan sin trabajar o de paso los esperan con el trabajo que dejaron pendiente, ya hecho?

Frankin Lituma