Pueblo afro conserva sus tradiciones en fin de ano
En el frondoso y verde paisaje del norte de Esmeraldas, cercano a Borbón, donde se asientan varias comunidades, se acostumbra celebrar el advenimiento del nuevo año con un sabroso chocolate con coco y con un envuelto de maíz pelado. Son dos preparacion
En el frondoso y verde paisaje del norte de Esmeraldas, cercano a Borbón, donde se asientan varias comunidades, se acostumbra celebrar el advenimiento del nuevo año con un sabroso chocolate con coco y con un envuelto de maíz pelado. Son dos preparaciones que no pueden faltar en esta fecha.
Según Sonia Vernaza, oriunda de Timbiré, “las comunidades del norte todavía no están contaminadas con costumbres llegadas de otras partes, aún conservan las tradiciones ancestrales de esta época festiva”.
Preparan para la cena encocado de pescado y de “carnes de monte”, como la guanta, armadillo, venado, etc. Pese a que son animales cuya caza está prohibida, para estas fechas se permite el incumplimiento de la norma”, comenta Vernaza. Ella es maestra en una de las escuelas de la parroquia Timbiré. Vivió y estudió en Guayaquil, pero la nostalgia y su vocación la hicieron regresar a trabajar en su tierra natal. Según la moradora, la venida de familiares de Guayaquil produce también la llegada de cosas novedosas y desconocidas a estos sectores.
Una vez concluida la celebración del año viejo, para el primer día del año venidero los lugareños recorren las playas de los pequeños riachuelos que se forman en los estuarios de la zona. Pasan el día allí, llevan comidas o implementos como fogones para prepararlas y así vivir un momento en familia. (F)