Ante las proximas elecciones

Muy poco es lo que se conoce respecto a las elecciones primarias o internas que debieron haberse llevado a cabo en todas las “tiendas” políticas que hay a millares surgir en nuestro país, para escoger los candidatos que terciarán en las próximas elecciones de marzo del año 2019. Esto se debe a que nuestra política criolla es clientelar y de orden familiar, lo que nada de bueno le hace a la democracia. Nadie, o muy pocos, son los que tienen claro qué es la política. Y por esa razón actúan muy “deportivamente” y sin un alto sentido de responsabilidad frente a aquellos a quienes se presentan a pedirles sus votos.

La política tiene diversos conceptos; pero es, entre otros aspectos importantes, el arte y la ciencia de la integración y no de la dominación, como equivocadamente piensan y sienten muchos. La política es una actividad que demanda la presencia permanente de los políticos en la difusión de sus ideales, de sus propósitos, de sus anhelos de trabajar honestamente por nobles causas que permitan el desarrollo de la sociedad. Lamentablemente en nuestra sociedad no existen hombres o mujeres que piensen y actúen de esta manera.

Nuestros “políticos” salen de pronto, como de la manga de un payaso para presentarse a la colectividad y ofrecerle lo que sus lenguas les impulsan a decir. Durante las campañas electorales, que por obvias razones son cortas, hacen bulla y alboroto. Si ganan los comicios, recién entonces empiezan a ver qué hacer. Y como consecuencia de ello, fracasan. Si pierden se retiran a sus cuarteles de invierno sin pena ni gloria, dejando en el camino a sus “seguidores”, sin saber qué hacer.

Esta dura realidad la vivimos constantemente. Y como corolario de estos procedimientos en el Ecuador no hay verdaderos partidos políticos, ni conductores o líderes que merezcan este nombre. Solamente hay grupos clientelares o de familia que se disputan las dignidades de elección popular.

Es imprescindible que en el Ecuador se entienda que no hay una verdadera democracia sin la presencia de partidos políticos bien estructurados.